“La crisis económica del país está afectando la seguridad alimentaria”
¿Cuál es el diagnóstico que el PMA hace sobre la crisis alimentaria en Venezuela ahora que se han desplegado en el país?
La crisis económica que atraviesa Venezuela está afectando la seguridad alimentaria de la población. En 2019, un estudio de campo realizado por el Programa Mundial de Alimentos arrojó que 2,3 millones de personas padecían inseguridad alimentaria severa. Eso significa que estas personas tenían dificultades para acceder a alimentos nutritivos y una dieta diversificada. Probablemente sean más ahora debido al impacto de la pandemia de Covid-19 que está golpeando a toda la región de América Latina y el Caribe.
¿En qué consiste la ayuda que brindará el PMA? ¿Por cuánto tiempo?
Hemos comenzado un programa de comidas escolares que prioriza a niños menores de seis años que están matriculados en centros de educación pública de preescolar. Nos enfocamos en este grupo porque a esa edad se encuentran en una etapa crítica de su desarrollo físico e intelectual que exige una buena alimentación para alcanzar todo su potencial. Debido al cierre de las escuelas por el Covid-19, estamos entregando en las escuelas raciones de alimentos para llevar a casa a los padres o tutores legales de los niños de preescolar. El personal de las escuelas también está recibiendo alimentos. Las raciones se seguirán entregando una vez al mes a cada niño hasta que las escuelas reabran. Cuando se pueda regresar a clases, apoyaremos en la mejora de las cocinas y brindaremos capacitaciones técnicas en el manejo de alimentos al personal de las cocinas para que comiencen a servir comidas calientes en los comedores escolares.
¿Cómo ha sido la respuesta del régimen de Nicolás Maduro a la asistencia del PMA? ¿Costó mucho tiempo para que Caracas aceptara el ingreso de ayuda?
Nos encontramos en Venezuela a solicitud de las autoridades nacionales y hemos recibido su apoyo para llevar adelante nuestras actividades siguiendo los principios humanitarios de independencia operacional, neutralidad, imparcialidad y humanidad. Las negociaciones que llevaron al acuerdo que firmamos el pasado 19 de abril en Caracas comenzaron en marzo de 2020. Fue un proceso complejo, pero siempre primó el mutuo interés de trabajar juntos y la necesidad de reconocer que las actividades humanitarias deben regirse por los principios humanitarios.