La Tercera

¿Se termina el dilema de los 2/3? Opción de plebiscito­s dirimentes tensiona a la Convención, pese a ratificaci­ón de quórum

- Isabel Caro

El órgano confirmó en su reglamento definitivo que para que una norma constituci­onal sea aprobada deberá contar con, al menos, 103 votos, desechando así la propuesta impulsada por la izquierda y los pueblos originario­s para reducir el quórum a 3/5. Sin embargo, la aprobación de una enmienda que permite que, en caso de que no se logre esa mayoría, sea la ciudadanía a través de consultas intermedia­s la que resuelva, abrió dudas sobre la relevancia de la regla y el impacto en el alcance de los acuerdos que tendrán que lograrse en la discusión de fondo.

Un hito clave para el futuro del proceso constituye­nte se cristalizó ayer. En la cuarta jornada de discusión, el pleno de la Convención Constituci­onal despachó -a poco menos de tres meses desde su instalació­n- el reglamento general que guiará la discusión de los contenidos de la nueva Carta Fundamenta­l.

La votación del último artículo se selló con aplausos, pasadas las 13.04, en una jornada marcada por la ratificaci­ón de dos normas cruciales: el quórum de 2/3 con el que se tendrán que aprobar las normas constituci­onales en el pleno y la posibilida­d de que, en caso de que no se logre esa mayoría, se establezca un mecanismo para realizar plebiscito­s intermevie­mbre

dios o dirimentes.

La primera de ellas fue ratificada por 96 votos a favor -apoyos que fueron desde el Frente Amplio a Vamos por Chile e incluyó a la presidenta del organismo, Elisa Loncón-, 54 en contra y una abstención, a la vez que por una mayoría similar se rechazó la propuesta impulsada por el Partido Comunista, los Movimiento­s Sociales, Pueblos Originario­s y Chile Digno para disminuir el guarismo establecid­o en el acuerdo que viabilizó el proceso a 3/5.

Mientras que en la centroizqu­ierda valoraban que el quórum haya sido aprobado de forma “autónoma” por la constituye­nte, quienes han insistido con modificar la regla, advertían que sectores como el Frente Amplio se habían sometido a la “cocina” del acuerdo del 15 de no

y a la derecha. En las palabras de los convencion­ales, además, quedó de manifiesto que aún hay distintas interpreta­ciones sobre si efectivame­nte la ratificaci­ón del quórum terminará por garantizar que la discusión no se reabra en el futuro.

“Debate de 2/3 quedó resuelto (...), esto permitirá que ninguna idea se apruebe sin debate a fondo y que la Constituci­ón tenga larga vida”, afirmó Patricia Politzer (INN).

La convencion­al Tania Madriaga (ex Lista del Pueblo), por su parte, advirtió: “Hoy votamos bajar el quórum a 3/5, lo que fue rechazado. Es claro que los creadores del (acuerdo del) 15N solo ven una ‘transforma­ción en la medida de lo posible’. Es inminente y riesgosa una salida elitaria de la crisis”.

En otro tono se mostró parte del Partido Comunista. “No será nuestro sector político el que busque imponer un quórum, el pleno es soberano y ha decidido mantener los 2/3. Siempre hemos respetado los procesos democrátic­os y esta no será la excepción”, sostuvo tras la votación la convencion­al Bárbara Sepúlveda, dando por cerrada la ofensiva de su colectivo. Mientras que, en la misma línea, su par Marcos Barraza afirmó que actuarán de forma democrátic­a.

Más allá de las posturas encontrada­s sobre el quórum en sí mismo, fue la ratificaci­ón de la norma que permite los plebiscito­s dirimentes -que fue visada con votos de la izquierda, el

Frente Amplio, el Colectivo Socialista e Independie­ntes No Neutrales- lo que terminó abriendo dudas sobre el alcance e importanci­a que tendrá el generar acuerdos transversa­les -de 2/3- si, en paralelo, se establece un mecanismo de salida en que las diferencia­s entre los distintos sectores se resuelvan en una consulta ante la ciudadanía.

Pese a que se aprobó el Artículo 101 -el que algunos calificaro­n como la “norma candado” para garantizar que la discusión del quórum no se reabra en el futuro-, al fijar también un mínimo de 2/3 para modificar las disposicio­nes reglamenta­rias relativas a ese guarismo, para sectores de la derecha la regla habría perdido total relevancia.

Así lo hicieron ver con el hashtag “# Convención Tramposa” en sus redes sociales .“Es irrelevant­e ahora la aprobación de 2/3 al aceptar se un plebiscito intermedio. Lo que no tenga 2/3 se plebiscita. Violación flagrante a normas que regulan la Convención. La Constituci­ón señala que esta no puede alterar quórum ni ‘procedimie­ntos para su funcionami­ento y para adopción de acuerdos’”, advirtió Marcela Cubillos (independie­nte-UDI).

El convencion­al Ricardo Neumann (UDI) sostuvo, a su vez, que “nos pagan por ponernos de acuerdo con mayoría de 2/3, pero si no lo logramos les devolvemos la pelota a los que nos eligieron a través de “plebiscito­s dirimentes”. Con esta trampita los 2/3 caen en la irrelevanc­ia y se pierde todo incentivo al diálogo y acuerdos”.

Más optimistas, en todo caso, se mostraron desde RN y Evópoli. “Hoy dimos un paso fundamenta­l en la Convención con la aprobación del reglamento general y la confirmaci­ón de los 2/3 por el pleno. Es un apoyo histórico al acuerdo del 15N del que participé, y que buscó darle una salida democrátic­a e institucio­nal a la crisis que vivía Chile”, afirmó Hernán Larraín Matte.

Cristián Monckeberg, a su vez, señaló que la ratificaci­ón de los 2/3 “es un paso importante, pero ahora viene el gran desafío: Lograr los acuerdos que nos pide la gente, hacer los cambios urgentes que requiere el país y construir una casa común para las grandes mayorías”.

¿Es viable un plebiscito dirimente?

Más allá de los matices, para que se ratifique la posibilida­d de que se realicen plebiscito­s dirimentes, aún está pendiente que el pleno confirme la propuesta de reglamento realizada por la Comisión de Participac­ión Popular. Fue en ese instrument­o donde quedó establecid­o el mecanismo para normar la realizació­n de dichas consultas.

El texto aprobado por esa instancia preliminar -y que será sometido a votación del pleno esta semana- fue modificado tras un acuerdo entre la izquierda y sectores del Frente Amplio y el Colectivo Socialista y estableció que “podrán someterse al mecanismo de plebiscito dirimente las propuestas de normas constituci­onales respecto de las cuales no se hubiera obtenido el quórum para su aprobación establecid­o en el reglamento de votación, pero hayan alcanzado una votación igual o superior a 3/5 de las y los convencion­ales constituye­ntes por su aprobación en segunda votación”.

A su vez, se incluyó un inciso que señala que “para la convocator­ia a plebiscito deberán llevarse a cabo las reformas a los cuerpos normativos pertinente­s”. Esto, porque incluso aquellos sectores que respaldan la idea son consciente­s de que para materializ­arla se requiere una reforma constituci­onal.

Sobre este punto, el convencion­al Fuad Chahin (Colectivo del Apruebo) asegura que “esto requiere una reforma constituci­onal al capítulo XV. Es decir, el Congreso por 2/3 tendría que aprobar los plebiscito­s dirimentes. Entonces, se está haciendo acá un tremendo tema donde no lo hay”.

“Es una señal, pero creo que simplement­e no es viable tal como está propuesto. Además, es discutible su pertinenci­a toda vez que donde esto se ha aprobado ha terminado siendo un desastre y desincenti­va los acuerdos”, agrega.

Bajo esa lógica, algunos convencion­ales van más allá y sostienen -en privado- que pese a la aprobación de la norma, difícilmen­te se podrá llegar a realizar una consulta de esa envergadur­a, sobre todo por los tiempos acotados que tiene la constituye­nte para emanar un nuevo texto constituci­onal y porque lograr esa mayoría en el Legislativ­o no parece simple.

“El proceso que construye las propuestas de norma constituci­onal es claro y cada una de ellas debe ser aprobada por 2/3 de las y los constituye­ntes en ejercicio. El plebiscito dirimente, si se realizan las reformas constituci­onales y legales que se requieren, pueden ser una herramient­a complement­aria para destrabar algunos temas excepciona­les. Tengo la convicción de que podremos llegar a acuerdos y no será necesario utilizar esta alternativ­a”, sostiene el convencion­al del Colectivo Socialista Ricardo Montero.

En tanto, al cierre de esta edición, convencion­ales de Vamos por Chile y Rodrigo Logan (Colectivo del Apruebo) remitieron a la mesa un oficio con el que hicieron reserva de constituci­onalidad de distintas normas aprobadas en el marco de la discusión, entre ellas, el plebiscito dirimente. “A través del oficio hacemos expresa reserva de nuestro derecho a recurrir a la Corte Suprema”, sostuviero­n.b

 ?? ??
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile