VOLUNTAD EN EL COMBATE A LA INSEGURIDAD
SEÑOR DIRECTOR:
Sobre la grave situación en temas de seguridad que estamos viviendo, se han entregado escasas respuestas concretas por parte de las autoridades a las urgentes demandas de los chilenos.
Sin embargo, se ha visto un avance legislativo. A más de un año de asumir, el gobierno dispuso el envío de 16 urgencias en materia de seguridad, nueve de las cuales ingresaron con calificación de “suma urgencia”, lo cual entrega un plazo de 15 días para ser conocido y despachado por la Cámara de ingreso. Entre estas iniciativas, una, aquella que aborda enfrentar de mejor manera la persecución del narcotráfico y el crimen organizado, ya fue despachada por el Senado y está próxima a convertirse en ley.
El nuevo texto toca diversas aristas que requerían actualización para fortalecer la persecución de estos delitos, entre ellas, potenciar las facultades del Ministerio Público en relación con los delitos asociados a la Ley 20.000 (de drogas); ampliar el destino de los bienes incautados; tipificar nuevos delitos; o entregar mecanismos más expeditos para la enajenación y decomiso de bienes.
La promulgación de este proyecto es una buena noticia y demuestra la necesidad y la posibilidad real de llegar a acuerdos en temas tan relevantes como la seguridad, cuando el temor de la población está en su máximo histórico y se requieren de soluciones efectivas para avanzar. Pero son absolutamente insuficientes si no van acompañados de, por una parte, medidas más operativas y, por otra, la voluntad política necesaria para su aplicación.
El presidente del Senado, Juan Antonio Coloma, propuso un “fast track” para el despacho en menos de 90 días de leyes que permitan combatir la delincuencia. Ojalá todos los sectores, gobierno incluido, se sumen a esta iniciativa que ciertamente beneficiará a toda la población.
Pía Greene Meersohn
Centro de Estudios para la Acción y Prevención en Seguridad Pública y Crimen Organizado, USS