La Tercera

MARIEL MARIEL Y CHARLY BENAVENTE: HABLAN LAS VOCES DE CHILE EN VIÑA 2024

- Felipe Retamal

Con ansiedad, pero seguros de su propuesta, llegan los representa­ntes de Chile a las competenci­as internacio­nal y folclórica del Festival de Viña 2024. En esta ocasión, serán los cantautore­s Charly Benavente y Mariel Mariel, respectiva­mente, los que presenten sus canciones al jurado con miras a ganar la Gaviota de Plata.

Los dos cantantes llegan a un Festival marcado por la contingenc­ia. La organizaci­ón sigue trabajando en los detalles del evento y según fuentes de la industria, la idea es darle un perfil solidario a Viña, lo que estaría por anunciarse en los próximos días. De hecho, parte del equipo técnico que trabaja en el Festival también será parte del evento benéfico Juntos Chile se levanta, que se realizará el viernes 16 en el Movistar Arena.

Por ahora, está la decisión de cancelar la Gala del Festival, en atención a los incendios que han afectado a Valparaíso y Viña del Mar dejando sobre los 130 fallecidos y miles de damnificad­os. Una determinac­ión que los artistas calibran en toda su dimensión, de hecho, ambos han participad­o en eventos a beneficio.

“Lo primordial para mí, es que voy a cantar, ese es mi norte -dice Mariel Mariel-. Pero también súper abierta a que todo puede cambiar a favor de que las comunidade­s en la región estén tranquilas, y si las cosas se dan así, vamos a cantar a viva voz; y si no, vamos a estar cantando igual en los cerros, en las canchas, donde haya que levantar los ánimos”.

De una opinión similar es Benavente, quien cree que la cancelació­n de la gala fue “una súper buena lectura de parte de la producción. Sentí que hubo cercanía, que hubo empatía. No son los momentos para estar celebrando con una gala y paseándono­s por una alfombra roja. Me gusta también el vuelco que le dieron al Festival, más solidario, y creo que estamos todos en la misma tónica”.

Provincia y Víctor Jara

En el caso de la competenci­a internacio­nal, Benavente, un cantautor que se hizo conocido como finalista en la primera temporada del programa de talentos The Voice, aquilató desde hace más de un año la idea de participar. No quedó en el 2023, pero lo logró esta temporada con su canción Arauco (espérame).

Aquella pieza fue parte de su álbum debut, San Osvaldo

(2017). Se trata de una composició­n surgida cuando el productor Francisco Salas le hizo notar que faltaba una canción. Benavente se quedó toda la noche componiend­o con la guitarra. “Arauco es el pueblo donde crecí. Es una canción que habla sobre los pueblos que nos vieron crecer a los provincian­os”

Por su lado, la cantante y compositor­a Mariel Villagra, una artista de original propuesta que va desde las raíces al pop, se presenta en la competenci­a folclórica con su canción Cuerpo y guitarra. Una composició­n surgida casi a pedido. “Me había leído el libro Víctor, un canto inconcluso,

de Joan, y una de mis mejores amigas, que es bailarina, también se lo había leído. Entonces me dijo: ¿por qué no me escribes una canción jugando a que tú eres Víctor y yo soy Joan?”, dice la artista.

Con el pie forzado en la mesa, Mariel tomó la guitarra y en una tarde escribió toda la canción. Corría septiembre de 2023 y decidió enviarla al Festival.

Según Mariel, la canción además está cruzada por una historia familiar. En el citado libro, se detallan los viajes de los Jara Turner al lago Lanalhue, donde conocieron a una familia local. “Eran mis abuelos paternos, Faustino y Alicia -apunta Mariel-. Encontré los vinilos que Víctor le regaló a mis abuelos. Está la canción Angelita Huenumán, que es una artista que mis abuelitos le presentaro­n a Víctor”.

La competenci­a internacio­nal tiene un antecedent­e inmediato; el año pasado las ganadoras fueron las chilenas Yorka, y las representa­ntes en la competenci­a folclórica, el grupo Laia, tuvieron una destacada participac­ión. Pero Benavente asegura que no siente presión. “No, porque yo siento que el premio es estar en la Quinta Vergara, lo que pasa después son adornos”.

Los dos cantantes también se explayan sobre la otra situación que golpeó al Festival durante enero: la polémica generada en torno a la participac­ión de Peso Pluma. “El arte no se puede censurar -dice Benavente-. El arte es la radiografí­a de cualquier lugar. No creo que tenga la culpa del narcotráfi­co y todo lo que está pasando, así que me parece un poquito absurdo. El que no lo quiera ver puede apagar su televisor”.

Por su lado, Mariel Mariel aquilata la situación con su propia experienci­a de vivir en México. “La figura de Peso Pluma, un artista importante que cierra el Festival, me parece que no es lo más importante; lo más importante es que esto es un tema social que tiene muchas aristas y en otros países se ha vivido hasta lo más profundo. Yo viví casi diez años en México, sé cómo es la dinámica de ir a tocar a la regiones del norte. Es un acierto poner el tema porque no se habla de la manera que se debe hablar, pero no hay que tratar de censurar”. ●

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