Bomberos e influencers tienen mejor evaluación que el gobierno en el manejo de los siniestros en la Quinta Región
El más reciente informe que realizó la empresa de investigación Ipsos calificó con un promedio de 4.1 el manejo del gobierno.
La principal causa de los megaincendios que azotaron la Región de Valparaíso durante febrero fue la intencionalidad, y el gobierno fue de los que tuvieron peor desempeño en cuanto al manejo de la emergencia.
Eso es lo que revela el más reciente informe que realizó la empresa de investigación Ipsos, para el cual indagó la opinión de más de 800 personas adultas de todas las regiones del país, con el fin de saber la evaluación de la ciudadanía de las instituciones durante la catástrofe.
Para eso, los encuestados calificaron el desempeño de diversas instituciones en una escala del 1 al 7. Y, en ese contexto, los bomberos fueron quienes más destacaron, pues obtuvieron un 89% de notas 6 y 7, alcanzando un promedio de 6,6. Por otro lado, y muy por debajo de ellos, se ubican el resto de los actores, como las municipalidades de las zonas afectadas, que fueron evaluadas con un 4,5 promedio.
Asimismo, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) tuvo un 44% de respuestas negativas (notas 1 a 4) y un promedio de 4,4. Finalmente, el gobierno se ubicó en la última posición con un 52% de evaluaciones negativas y una media de 4,1.
Un 41% de las personas que evaluaron negativamente el desempeño del Ejecutivo argumentó su opinión en la “demora en la respuesta durante la emergencia y, también, en la demora posterior al momento de entregar ayudas”. Las fallas en el manejo de la emergencia por incendios forestales desencadenaron una serie de procesos investigativos paralelos que buscan dilucidar cómo se gestionaron las alertas y el combate de la emergencia entre los servicios respectivos, así como transparentar el despliegue las instituciones gubernamentales: Senapred y la Corporación Nacional Forestal (Conaf).
Influencers al alza
Quienes también obtuvieron una opinión positiva respecto a su contribución hacia los damnificados fue la propia ciudadanía: un 64% piensa que la respuesta de la gente ha sido mayor a la esperada. Por el contrario, las empresas, las municipalidades de la zona afectada y el gobierno son los organismos que menos habrían contribuido según la percepción de las personas. Un 47% señala que el aporte del gobierno ha estado por debajo de las expectativas.
“La percepción generalizada es que la principal ayuda o colaboración hacia los damnificados ha venido por parte de la misma gente, organizaciones sin fines de lucro y personalidades públicas, como influencers y cantantes. En los márgenes se valora el aporte del gobierno y las empresas, aduciendo su demora, insuficiencia o simplemente nulo accionar”, sostiene Pablo Alvarado, director de estudios públicos de Ipsos Chile.
Asimismo, agrega que “si hay algo que las personas valoran positivamente en los momentos de crisis es la respuesta rápida y oportuna, sea esta proveniente de las instituciones públicas o privadas. En este aspecto, la percepción que tiene la ciudadanía sobre los organismos públicos es negativa y no tiene posibilidad de cambio en la medida que la emergencia ya ocurrió y, con ello, la oportunidad de demostrar eficiencia”
Jorge Fábrega, académico de investigación de la complejidad social de la Universidad del Desarrollo, explica que este es un fenómeno recurrente y no sólo en Chile: “Por lo general la gente suele valorar muy bien a Bomberos en todas partes, básicamente porque su labor es altruista y en beneficio directo y concreto de la comunidad, y eso de inmediato genera empatía y confianza. Y por eso siempre lo más probable es que los bomberos tengan mejor nota que el gobierno de turno en situaciones de emergencia”.
Endurecer las penas de intencionalidad
Por otro lado, un 77% cree que la principal causa de los incendios fue la intencionalidad, mientras el resto señala el descuido humano.
En ese contexto, consultados por las medidas que debería tomar el Estado para prevenir y combatir futuros incendios de este tipo son: endurecer las penas y sanciones para quienes cometan incendios intencionales (61%), invertir en la formación y equipamiento de Bomberos (50%) e invertir en infraestructura pública como cortafuegos y zonas de seguridad (41%).
En ese escenario, Fábrega añade que “si hay un incendio, la gente a veces empieza a preguntarse por qué pasó esto, qué falló en la prevención, o si las regulaciones sobre seguridad estaban al día o no”.
Incluso, la ministra de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval, indicó que su cartera pondrá en manos del Consejo de Defensa del Estado (CDE) los resultados de la indagatoria que realizaron sobre el incendio forestal que afectó a la Reserva Nacional Lago Peñuelas, uno de los focos de los siniestros simultáneos que tuvieron lugar en la Región de Valparaíso en los primeros días de febrero. ●