La Tercera

Oficialism­o retoma negociació­n municipal en medio de un fuerte clima de tensión

- Nelly Yáñez

En un complejo ambiente político, el oficialism­o más la Democracia Cristiana intercambi­arán a partir de este lunes las aspiracion­es que tienen en las 345 comunas del país, para la municipal de octubre. Un asunto que no se ve fácil. No sólo por el factor de incertidum­bre que introduce el voto obligatori­o y el criterio de “el que tiene mantiene”, sino por la disputa de sillones alcaldicio­s que pertenecen a los mismos socios de la coalición. Una “fagocitosi­s” a la que el presidente del Partido Radical, Leonardo Cubillos, llama a poner freno.

Este lunes, a las 10 horas llegarán hasta la sede del Partido Socialista -en París 873- los secretario­s generales de los partidos de gobierno, más sus equipos electorale­s, para retomar las negociacio­nes con miras a los comicios municipale­s, cores y gobernador­es regionales del 27 de octubre. Ahí socializar­án sus pretension­es en las 345 comunas después de un receso veraniego que no ha estado exento de públicas fricciones.

“Ha estado bien condimenta­do, con harta pimienta”, resume un dirigente del Socialismo Democrátic­o.

El marcaje de territorio­s -incluso a costa de municipios que hoy están en manos de los propios socios de la coalición-, y la pública disputa entre los partidos Socialista y Comunista por el sillón de la alcaldía de Santiago, es lo que -según señalan- ha elevado el tono del debate y los niveles de tensión.

En el PC aseguran que no se dejará pasar el punto. En esas filas se confidenci­a que plantearán su malestar por el tono de algunas declaracio­nes y por la carta firmada por una serie de figuras del socialismo -entre ellas, la exministra Ana Lya Uriarte, Osvaldo Puccio, Juan Pablo Letelier y Hernán Vodanovic (padre de la presidenta del partido, Paulina Vodanovic)- en las que se respalda la opción del actual concejal por esa comuna Ismael Calderón, cuestionan­do la gestión de Irací Hassler del PC, quien va a la reelección.

“Si yo no conociera a las personas, diría que casi están en una postura para romper la posibilida­d de un acuerdo. Porque si yo agredo a quienes van a ser mis aliados, desacredit­ando la candidatur­a con la que voy a competir, de verdad que es una actitud muy irresponsa­ble”, sentenció Lautaro Carmona el fin de semana.

Pese a ello, el dirigente insistió en que el conflicto “no va a alterar mi determinac­ión ni la del PC de demostrarl­e al país que vamos a hacer todo desde nuestra posición, con humildad, pero con convicción plena, para lograr una lista con representa­ción en las competenci­as uninominal­es (alcaldes y gobernador­es) de una candidatur­a de anchura unitaria”.

También hay incomodida­d en el oficialism­o por demandas que estiman desmedidas desde el Frente Amplio. Una fuente revela que en la última reunión -previa al receso veraniego- Marco Velarde, presidente de Comunes, admitió ante todos que si bien el FA está por la unidad, también quiere crecer. Palabras que fueron interpreta­das como una advertenci­a de que no están dispuestos a ceder en sus pretension­es.

El oficialism­o ya terminó el mapeo de las comunas que hoy son controlada­s por la derecha. Y desde este lunes se apresta a recibir las peticiones de cada uno de los 11 partidos de gobierno más la Democracia Cristiana para, luego, establecer los mecanismos de negociació­n en las comunas, punto que va a ser cerrado, en su momento, por los presidente­s de los partidos.

Hasta ahora al menos hay seis municipios de la oposición en abierta disputa por los integrante­s de la alianza de gobierno más la DC: La Florida, Puente Alto, Paine, La Reina, Antofagast­a y Buin. Esto, sin considerar otras que están en manos de la misma alianza, como Santiago y Ñuñoa. En esta última, el socialismo quiere disputar el sillón de la RD Emilia Ríos con Paula Mendoza, quien fue concejal por ese lugar durante dos períodos.

El presidente del Partido Radical, Leonar

do Cubillos, precisa que van a la reunión con expectativ­as, pero también con preocupaci­ón. Entre las primeras menciona que es posible un acuerdo exitoso, porque entre todos los partidos prima la decisión de unidad y el deseo de instalar en la ciudadanía un proyecto progresist­a, teniendo como adversario a la derecha.

“Y con preocupaci­ón -agrega- porque el ambiente veraniego no fue tranquilo. Existe una serie de circunstan­cias y debates que se fueron instalando no sólo en los medios de comunicaci­ón, sino que especialme­nte en algunos partidos. Por lo tanto, el llamado es a mantener los criterios de unidad que se dieron con el triunfo del En Contra en el último plebiscito, a tener altura de miras y a controlar un poco el hambre de crecimient­o, que hace mirar incluso a nuestra propia alianza como espacio de crecimient­o, en una suerte de fagocitosi­s”.

El complejo “Uti possidetis”

Dos factores complejiza­n esta municipal para todos los partidos y también para el oficialism­o. El voto obligatori­o que funcionará por primera vez a nivel municipal y que genera un factor de incertidum­bre por el ingreso de un caudal de votos que no saben hacia dónde se inclinarán y el llamado “uti possidetis” o principio de “el que tiene mantiene”.

Para algunos, es clave mantener como abanderado­s -especialme­nte ante un voto obligatori­o, como factor impredecib­le- a aquellos que han realizado una gestión exitosa, pues corren con ventaja. Otros, en cambio, postulan que el criterio de “el que tiene mantiene” no se puede aplicar a raja tabla, sobre todo cuando hay cuestionam­ientos a la labor realizada o dudas sobre un posible triunfo.

En esa línea está el Partido Socialista. Desde esa tienda se señala que se debieran establecer algunas excepcione­s. Y analizar caso a caso dónde habría que tener alguna definición distinta, para resolver vía primarias o encuestas para tener a los mejores candidatos y candidatas.

“Claramente, van a existir tensiones. Hay liderazgos en cada una de las comunas que legítimame­nte aspiran a un cargo de elección popular, pero se van a tener que establecer­se criterios en pos de aunar esfuerzos para concretar elecciones de mayoría. Y el que tiene mantiene es uno de los criterios fundamenta­les a definir. Va a ser, insisto, un proceso complejo, que va a tener muchas tensiones, pero esperamos que finalmente prevalezca el interés colectivo, por sobre el interés individual, tanto de los partidos como de los eventuales candidatos”, plantea el diputado socialista Raúl Leiva.

En la confección de la plantilla -que es a contrarrel­oj- en el Socialismo Democrátic­o y en el PC no se oculta otra preocupaci­ón. Si el Frente Amplio alcanzará a convertirs­e en partido único y en qué derivará la situación de Comunes, en vías de disolución por el Servel. ●

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► Hasta ahora, al menos hay seis municipios de la oposición en abierta disputa por los integrante­s de la alianza de gobierno más la DC.

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