Orrego se resiste a ser candidato por cupo de partido y apuesta por representar al pacto DC-oficialismo
Entre los parlamentarios que hablaron a favor del proyecto de resolución se encontraba el diputado republicano Cristián Araya y el parlamentario independiente (exRepublicanos) Johannes Kaiser. Un momento inédito en la historia política chilena.
El gobernador de la Región Metropolitana tuvo este lunes una reunión con la directiva del Partido Socialista. Ahí transparentó su intención de representar a las once colectividades -del PC a la DC- en lugar de competir a través del cupo de uno de ellos. Su postura causó sorpresa en la Democracia Cristiana, colectividad que le había ofrecido el espacio para competir.
Han pasado 146 días desde que Claudio Orrego (Ind.) dijo públicamente que buscará ir a la reelección. Desde entonces ha mantenido en suspenso la forma en la que pretende renovar su período como gobernador de la Región Metropolitana: como independiente fuera de pacto o con el respaldo de un partido del oficialismo o de su exdomicilio político, la Democracia Cristiana (DC).
“Este es un tiempo de conversaciones con todo el mundo. Un independiente siempre tiene que tener claro que lo más probable es que tenga que salir a juntar firmas. Eso no quiere decir no buscar apoyo en distintos actores que crean que uno ha hecho un buen trabajo. Mi domicilio político es la centroizquierda”, dijo en octubre del año pasado, en entrevista con La Tercera.
La espera, sin embargo, está próxima a llegar a su fin. Este lunes por la tarde, la máxima autoridad regional se reunió en el café Beppo de Providencia con la presidenta y el secretario del Partido Socialista, la senadora Paulina Vodanovic y Camilo Escalona, respectivamente. Ahí, entre un cenicero y una tetera, Orrego les transparentó sus intenciones.
La ley que regula la elección de gobernadores regionales menciona que las candidaturas “podrán ser declaradas por un partido político, por un pacto de partidos, por un pacto entre un partido político e independientes, por un pacto de partidos e independientes, y por independientes”. La opción que satisface de mejor forma a Orrego es ser el candidato del pacto que se pretende construir entre los diez partido de gobierno y la DC, y no competir a través de uno en particular.
Esa última alternativa estaba sobre la mesa en consideración de que, tanto desde la DC como desde el PS, se le ofreció a Orrego competir a través de un cupo de partido.
Consultada por este medio, la senadora Vodanovic dijo que “entendemos las razones de él para, en su calidad de independiente, pedir apoyo de los partidos políticos del progresismo para ser el candidato del pacto. Entendemos
sus motivaciones y estamos con la decisión como partido de apoyar aquello: que vaya por el pacto, no por cupo de partido”.
Desde el equipo del gobernador complementan que esta reunión es parte de una serie de encuentros con “distintos actores políticos progresista” en los que la autoridad regional ha planteado su interés de representar a todo el sector en las elecciones de octubre, como independiente dentro del pacto electoral.
De hecho, en enero Orrego tuvo una reunión con la directiva del Partido Comunista, encabezada por Lautaro Carmona. Anteriormente el PC había presentado algunos repartos en torno a la figura de Orrego. A comienzos de ese mes, y en referencia al gobernador, el timonel de los comunistas dijo a este medio que “nadie puede dar por hecho que tiene resuelto por anticipado candidaturas antes de conversar”.
Desde su equipo también señalaron que “el Partido Socialista ha reiterado su apoyo a Orrego y ha planteado que es la mejor carta para competir frente a la derecha. Así también se lo han hecho saber los alcaldes, consejeros regionales y parlamentarios del Partido Socialista en la región”. La muestra más visible de apoyo que ha recibido el actual gobernador ocurrió en diciembre del año pasado, cuando un grupo de alcaldes -desde la DC hasta el Frente Ampliose juntó con él para expresarle su respaldo.
Pese a las intenciones de Orrego de querer representar al pacto, y aunque en los partidos de izquierda y centroizquierda hay pocas voces que pongan en duda que él es el rostro mejor posicionado, se han levantado algunos nombres para hacerle competencia. Por una parte, los regionalistas verdes preparan a Nathalie Joignant como precandidata, quien en la elección pasada obtuvo el tercer lugar, por detrás del actual gobernador y Karina Oliva (exmilitante de Comunes).
Por otro lado, la DC inscribió como precandidato al consejero nacional Nicolás Preuss. Él, en todo caso, es el plan B, puesto que el partido dirigido por el diputado Alberto Undurraga aún apuesta porque Orrego compita a través de un cupo de ellos. De hecho, hasta la semana pasada transmitían que esa opción aún estaba sobre la mesa y que no habían recibido una respuesta. Por lo mismo, algunos dirigentes manifestaron sorpresa al enterarse de la reunión que tuvo con el PS y lo que ahí se abordó.
En parte, en la DC quieren que Orrego compita a través del partido debido a que, según calculan, si presentan un candidato en la Región Metropolitana recibirán aproximadamente $480 millones como aporte -de acuerdo a la ley electoral-. Por lo mismo, en caso de que rechace definitivamente competir en cupo decé, desde la colectividad algunos advierten que mantendrían en pie la precandidatura de Preuss.
El presidente regional metropolitano de la DC, Rodrigo Albornoz, dijo a este medio que en el consejo nacional de este 9 de marzo planteará que “la candidatura de actual gobernador no es representativa de la DC”, que “no existen razones políticas para prescindir de una candidatura propia” y que “en la elección de gobernador regional existe la segunda vuelta, por tanto, no se justifican acuerdos políticos previos a la primera vuelta, menos con partidos con quienes no tenemos ni formamos parte de alguna alianza o coalición”.
Además, advirtió que “no hemos cerrado aún el procedimiento de inscripción de candidatos al Gobierno Regional Metropolitano. A Nicolás Preuss se le pueden incorporar más nombres aun, para que la DC tome una decisión de una candidatura”. ●
Un momento inédito en la historia política se vivió este martes en la Cámara de Diputados luego que los parlamentarios aprobaran un proyecto de resolución que considera la búsqueda de “la verdad y la justicia” para las víctimas de violaciones a los derechos humanos y de detenidos desaparecidos “durante la dictadura militar”. Este último concepto ha sido históricamente renegado por la derecha.
En concreto, el proyecto -que menciona en cuatro oportunidades la palabra “dictadura”-, solicita al Presidente Gabriel Boric “medidas legislativas en materia procesal que permitan establecer mecanismos de entrega de antecedentes fidedignos que se refieran al paradero de los detenidos desaparecidos o de las circunstancias de su desaparición”.
Asimismo, se le solicita al ministro de Justicia, Luis Cordero, que “realice las gestiones que sean necesarias ante la excelentísima Corte Suprema a fin de que los jueces con dedicación exclusiva en materia de derechos humanos puedan contar con todos los recursos que sean necesarios para culminar sus investigaciones”.
El proyecto se enmarca en la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado y se encontraba pendiente su votación.
Aprobación unánime
El documento fue presentado por los socialistas Daniel Manouchehri, Jaime Naranjo, Ana María Bravo, Daniella Cicardini, Emilia Nuyado, Daniel Melo, Raúl Leiva, Marcos Ilabaca, Nelson Venegas y Danisa Astudillo.
Y fue aprobado por unanimidad por los parlamentarios presentes, vale decir, que no hubo abstenciones ni posturas en contra.
Sorpresivamente dentro de los parlamentarios que hablaron a favor del proyecto, se encontraba el diputado Republicano, Cristián Araya, y el parlamentario independiente (ex Republicano) Johannes Kaiser. Sin embargo, ambos hicieron hincapié en que no veían voluntad política y judicial para identificar osamentas que están en custodia del Servicio Médico Legal (SML).
“Durante el gobierno restaurador de las Fuerzas Armadas y de Orden se cometieron abusos, excesos y crímenes por parte de agentes del Estado. Es cierto. También es cierto que hay más de mil personas que fueron detenidas y cuyo paradero aún es desconocido. Todos los esfuerzos que sean necesarios para dar cristiana sepultura a las personas desaparecidas cuentan con nuestro total y más absoluto respaldo”, dijo primero Araya.
Por su parte, Kaiser apuntó a la identificación de detenidos desaparecidos: “69 cajas de mercadería donde se encuentran personas que son posiblemente detenidos desaparecidos no identificados desde hace más de 20 años. Cientos de personas pueden estar ahí. Más de 100 de todas maneras, me decía una fuente del Servicio Médico Legal. 578 protocolos abiertos en regiones y más protocolos abiertos en la Región Metropolitana. Estamos hablando potencialmente de más de 1.000 personas no identificadas hasta el día de hoy, gracias a
la desidia, a la falta de compromiso, quien sabe si a la prevaricación de los jueces a los cuales se les asignaron las causas de derechos humanos. Y el sistema político ha callado, el sistema político ha cerrado los ojos ante esta insoportable situación”.
“Y no le echemos la culpa al Servicio Médico Legal, porque el Servicio Médico Legal no puede identificar de oficio. Tiene que hacerlo solo y exclusivamente de la mano de una orden de un juez competente. Y los jueces no dan la orden o la dan tarde, mal y nunca. (...) Es muy posible que tengamos a la gran mayoría los detenidos desaparecidos en poder del Estado desde hace más de 20 años y este Estado fracasa de manera permanente en entregarlo a sus familiares, y eso es una continuación de la violación de derechos humanos que supuestamente lamenta este Congreso. Es hora de que termine esta farsa, es hora de que se identifiquen los restos y se les entregue a sus familias”.
El tono sugerente de esos discursos, no obstante, molestó a la diputada Lorena Pizarro (PC), hija del dirigente comunista Waldo Pizarro, detenido desaparecido en dictadura, quien intervino en la sala para cuestionar a los legisladores opositores. “No tienen pudor. Se atreven a hablar de que no los queremos encontrar. No, señores. Desde el 90 que nos han tratado de canjear: verdad o justicia, los huesos o nada... No sean cara de palo. No vengan ustedes a hablar de nuestros muertos”.
A pesar de la discusión que se dio en la sala, finalmente el proyecto fue aprobado por los 146 diputados presentes.
En todo caso, el fondo de la resolución es compartido por la derecha, a pesar de que no compartan el uso de conceptos como ‘dictadura’.
De hecho, los dirigentes opositores suelen hablar de gobierno militar o régimen para referirse a ese período. La razón para apoyar el texto tiene una explicación política. Además de debilitar la estrategia de emplazamientos en contra el papel que desempeñó la derecha en la dictadura, en Chile Vamos y en el Partido Republicano sospechan que detrás de la demora en la identificación de restos en manos del SML también hay un intento de algunos personeros de izquierda de mantener abierto el tema de los detenidos desaparecidos. ●