THE OFFSPRING REGRESA A CHILE: “NUNCA HEMOS SIDO UN GRAN FAVORITO DE LA PRENSA”
No recuerda con precisión el detalle, pero a Noodles (el alias del estadounidense Kevin John Wasserman), aún no se le borra el momento en que junto a su banda The Offspring, tocó por primera vez en Chile. “Creo que el primer lugar donde tocamos en Sudamérica fue Santiago, no estoy seguro exactamente cuando, pero sé que fue en el invierno de allí y fue hermoso. Y la multitud estaba enloquecida de energía”, recuerda el guitarrista vía Zoom.
En rigor, el primer show de los californianos en el país ocurrió el 7 de agosto de 1997, en el entonces Teatro
Monumental. Por esos días llegaban como uno de los puntales de una escena de bandas de punk rock más cercana al pop, en que también descollaban nombres como Pennywise, NOFX y unos jóvenes Blink 182. Volvieron en 2013, 2016 y en 2020 marcaron un hito al realizar el último show que se pudo montar en el país antes de la pandemia.
En estos días, The Offspring se alista para el reencuentro con el público chileno en el marco del festival Lollapalooza, donde se presentarán el sábado 16 de marzo. Un show en el que repasarán sus éxitos como Self esteem y Pretty fly (for a white guy), además de algunas sorpresas. “Hemos estado trabajando en algunas cosas nuevas, algunas versiones. También un montón de nuestros viejos éxitos, y espero que algunos cortes menos conocidos de nuestros álbumes”.
Con su experiencia de años, Noodles (cuyo apodo deriva del slang noodling, que se refiere a las improvisaciones) aquilata lo mejor y lo peor de presentarse en un evento de ese calado. “Lo mejor es que en los festivales hay una energía especial, sin duda. También me gusta ver a grupos diferentes, bandas a las que normalmente no iría a ver por mi cuenta, pero como están allí, las veo. Probablemente lo peor es que a veces hay mucho ruido entre bastidores. Pero ahí es cuando los auriculares resultan útiles”
¿Y es realmente distinto el público latino?
Muy apasionado. El público latino es muy enérgico, es como una locura. Pero en Italia y España también son así. Ellos son muy diferentes de Alemania o Austria, pero Sudamérica y Chile especialmente, tienen algo propio, sin duda.
¿Qué escucha hoy?
Personalmente, he estado escuchando el último disco de Pixies, Doggerel, que salió en 2022 así que ya tiene casi dos años, pero es genial. También hay una banda de California llamada Plague Vendor que me gusta bastante. Y hay un tipo, Nate No Face, que he estado escuchando mucho.
¿Y ha escuchado alguna de las nuevas estrellas como a Billie Eilish o a Dua Lipa?
Sí, me encanta Billie Eilish, de verdad. Ha sacado un EP llamado Guitar songs, y creo que esas dos canciones acústicas son increíblemente conmovedoras. Pero me gusta, creo que ella es muy honesta. No he escuchado mucho a Dua Lipa, la he visto en la televisión y cosas así. Muchas de las cosas pop no me atrapan.
El gran cambio
Fue una ruptura la que inspiró Self Esteem, uno de los sencillos noventeros ineludibles de Offspring en sus sets de directo. “Teníamos una amiga que recibía llamadas de un ex novio suyo, y ella no le decía que no. Nosotros relatamos lo duro que es cuando estás enamorado de alguien, pero te están utilizando. Toma un tiempo para que te pongas al día. Y si tienes baja autoestima, soportas más mierda de la que deberías. Sí, todos podríamos relacionarnos con eso, pero esa es realmente la historia”, cuenta Noodles.
Lanzada hace 30 años, esa canción fue incluida en el álbum Smash (1994), el tercero de la discografía del grupo que marcó un momento clave: los sacó del anonimato. Hoy, parte de su set en vivo está dedicado a recordar ese hito.
“Ese disco creó mi carrera -dice Noodles-. Antes yo era un conserje en una escuela primaria. Yo todavía estaba tratando de averiguar qué quería, pero yo sabía que no quería ser un conserje el resto de mi vida. Entonces Smash explotó y tanto Dexter (Holland, cantante del grupo) como yo nos dijimos, tenemos que recoger esta pelota y correr con ella. Él estaba a un año de su doctorado, y dejó todo. Finalmente lo terminó hace unos años”.
El álbum fue lanzado por la discográfica independiente Epitaph Records, fundada por Brett Gurewitz, guitarrista de Bad Religion. “Tuvimos que ensayar mucho antes de ir a grabar. Llamábamos al estudio por la mañana y preguntábamos si tenían sitio. Y si no lo habían vendido antes, nos lo daban a mitad de precio porque Epitaph no tenía mucho dinero. Era un sello independiente, así que teníamos que hacerlo todo barato”.
¿Leían las críticas de los medios?
En primer lugar, nunca hemos sido un gran favorito de la prensa. Los críticos musicales nunca se han interesado por nosotros, siempre nos han descartado, y está bien. Creo que es probablemente porque tenemos un montón de éxitos pop y luego tenemos éxitos serios. Y a los críticos siempre les gustan más las cosas serias que otras como Pretty fly (for a white guy), odiaban esas cosas. Incluso Come out and play era demasiado pop.
The Offspring se presentarán en Lollapalooza Chile el sábado 16 de marzo a las 18.30 horas en el Cenco Malls Stage. Aún quedan tickets disponibles en el sitio https://lollapaloozacl.com/ ●