Colegios pertenecientes a algún SLEP han sufrido 202 robos o actos vandálicos en lo que va de año
Luego de la serie de hechos que afectaron a los recintos de Atacama, la Dirección de Educación Pública encargó un levantamiento de información a todos los servicios en régimen. Los resultados dan cuenta de un fenómeno que no afecta solo a los establecimientos del norte del país.
“Ha habido muchos robos y vandalizaciones en las escuelas de manera inusitada (...) nos parece muy extraño la intensidad que ha tenido el tema de vandalizaciones y robos. Ha habido casos en los que han entrado a establecimientos educacionales sólo a destruir, lo que me lleva a sospechar. En menos de un mes hay más de 30 robos y vandalizaciones, y hay más de 300, si yo sumo el periodo 2023”.
Así se refirió a fines de febrero el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, a los robos que en particular estaban sufriendo los establecimientos educacionales dependientes del Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Atacama, situación que lo llevó a decir que por el tipo de delito le quedaba la sensación de que sólo se estaba intentando obstaculizar el proceso de desmunicipalización en la zona, llegando a señalar que podría ser un “intento de boicot”.
Y aunque sólo en Atacama esta situación llevó a que se creara una mesa de seguridad junto a Carabineros, PDI y Fiscalía para coordinar apoyos, además de presentarse una querella por la serie de robos, la realidad dice que el servicio educativo nortino no es el único que ha sido víctima de situaciones así. Ni este ni el año pasado.
Y es que luego de visitar la región durante los últimos días de febrero y percatarse en terreno de la gravedad del asunto, el director subrogante de la Dirección de Educación Pública (DEP), Rodrigo Egaña, ordenó un levantamiento de información en todos los SLEP del país que ya tienen establecimientos educacionales a su cargo, para tener un punto de comparación y poder concluir si es que lo de Atacama era un caso aislado o no.
“Nos dimos cuenta de la gravedad de los efectos de los robos y actos de vandalización que han sufrido establecimientos públicos. Es de una gravedad enorme, ha habido destrucción de vidrios, puertas, bibliotecas, como que les hubiesen pegado con un chuzo. Y todo desordenado adentro, una cuestión vandálica. Había entra