Exministro Hernán Larraín afirma que nunca recibió “una solicitud” de Luis Hermosilla
“Mantuve mi compromiso de actuar en forma independiente y ajena a toda injerencia externa, contando siempre con el respaldo presidencial”, afirmó el extitular de Justicia en una declaración.
El exministro de Justicia Hernán Larraín, que dirigió esa cartera en el segundo gobierno de Sebastián Piñera, dio a conocer este miércoles una declaración en la que aborda la polémica por la supuesta influencia del abogado Luis Hermosilla en designaciones de cargos en el Poder Judicial. “En cuanto a la influencia que dicho abogado pudiera haber ejercido en los nombramientos efectuados en la segunda administración del Presidente Piñera, donde me desempeñé como ministro de Justicia y Derechos Humanos durante los cuatro años de su gobierno, puedo señalar que no tengo antecedentes que aportar, que no sea señalar la práctica histórica por la que terceros hacen llegar sugerencias por distintos medios durante el proceso correspondiente”, expresó Larraín en su declaración.
Hermosilla -investigado por la Fiscalía Metropolitana Oriente, imputado por un supuesto soborno a funcionarios públicosfue el “cerebro judicial” del segundo mandato de Piñera, debido a su cercanía personal de décadas con el otrora ministro del Interior Andrés Chadwick.
“Mantuve mi compromiso de actuar en forma independiente”
“Personalmente, no recibí nunca una solicitud de dicho profesional y mantuve mi compromiso de actuar en forma independiente y ajena a toda injerencia externa, contando siempre con el respaldo presidencial, para que nuestras decisiones en esta materia, basadas en criterios objetivos, fueran autónomas. La responsabilidad empleada en esta tarea significó que no hubiera cuestionamientos a nuestro proceder”, señaló el exministro de Justicia.
En 2021, Hermosilla intentó influir en los nombramientos de la Corte de Apelaciones de Santiago, donde buscaba que no asumieran las ministras Carola Brengi y Paula Merino. En ese momento, desde la cartera que encabezaba Larraín se le hizo saber la molestia a La Moneda -incluso al Presidentepor los intentos del penalista de intervenir para favorecer a nombres que no eran los que impulsaba el Ministerio de Justicia.
En su declaración, Larraín destacó que desde el primer momento, conversó con el Presidente Piñera “respecto de la necesidad de reformar el actual sistema de nombramientos del Poder Judicial, dada las graves deficiencias que presenta”. “La discrecionalidad con que las Cortes forman las ternas, así como la que tienen los Presidentes de la República para resolver (delegada normalmente en el ministro de Justicia y Derechos Humanos), se puede prestar efectivamente para todo tipo de arbitrariedades, si ellas quisieran cometerse. La ausencia de transparencia, la falta de fundamentos en la elección de los designados, la prevalencia de la antigüedad por sobre el mérito, entre otras debilidades, exigían un cambio radical del sistema”, señaló.