Jeannette Jara, una ministra presionada
La titular del Trabajo enfrentó un complicado estreno de la ley que reduce la jornada laboral a 40 horas. También busca la fórmula para avanzar en un esquivo acuerdo por la reforma laboral.
“¡Se siente, se siente, Jara presidenta!”. “Ya la están proclamando, ministra”, dijo entre risas el titular de la Segpres, Álvaro Elizalde (PS), interrumpido en medio de su discurso por los gritos de los sindicatos fuera del Ministerio del Trabajo, en Huérfanos, que celebraban la implementación de las 40 horas.
“Me pongo roja”, respondió la ministra del Trabajo, Jeannette Jara (Partido Comunista).
El rubor de la secretaria de Estado no solo se debía a los gritos de los asistentes, sino que también a los elogios de Elizalde. “Quiero agradecer especialmente a la ministra Jeannette Jara, porque tiene un juego de piernas que hizo posible construir la mayoría necesaria”, dijo el socialista.
El festejo por la entrada en vigencia de la ley fue un respiro para la ministra en medio de días intensos, no solo por las dudas que ha dejado la implementación de las 40 horas: el miércoles de la próxima semana, 1 de mayo, se conmemora el Día del Trabajador, y la reforma previsional la tiene haciendo gestiones sigilosas bajo una presión que aumenta con el correr de los días, ya que el Presidente Gabriel Boric ha planteado que mayo es el mes en que la Comisión de Trabajo del Senado debería aprobar el proyecto.
La reforma de pensiones es la apuesta de “legado” que se han planteado como principal objetivo en el comité político tras el rotundo fracaso que tuvo la reforma tributaria en 2023. Y esta semana, el Presidente le puso mayor urgencia al condicionar el avance de las reformas al sistema político a que se llegue a un acuerdo con la oposición en materia de pensiones.
“Toda discusión respecto a algo tan importante como el sistema político va o debiera ser posterior a que zanjemos la discusión que yo diría más les importa a los chilenos, que es en particular la reforma de pensiones”, dijo este martes el Presidente.
Mientras que este jueves Boric, en el encuentro empresarial Enade, mantuvo su posición, pero se comprometió a avanzar en los cambios en el sistema político durante su gestión.
Frente al debate de avanzar primero en reformas políticas o de priorizar el cambio al sistema de pensiones, Jara -como incumbente- aboga por lo segundo. Ella junto a la ministra Vallejo y la ministra de la Mujer, Antonia Orellana (Convergencia Social), son las que han puesto más reparos a la opción de acelerar una reforma política si es que no ven gestos concretos desde la oposición en demandas sociales, en especial en materia de pensiones.
“Sería muy extraño que en nuestro país el sistema político se preocupara solamente de resolver entre políticos los problemas que a los políticos les preocupan, pero las pensiones, que le preocupan a la gran mayoría de los chilenos, quedarán nuevamente postergadas”, dijo Jara.
La ministra Jara se juega su capital político en el futuro de la reforma previsional. En abril 2023 era la tercera mejor evaluada, post 40 horas, con un 57% de aprobación, y en la última medición de Cadem fue la sexta, con un 49%.
La ministra sabe que corre contra el tiempo, y así se los ha planteado en los últimos días a sus cercanos y a los ministros del comité político. Más aún luego de que esta semana el diputado Enrique Lee (Partido Regionalista Independiente), presentara un proyecto de ley para buscar la aprobación de un séptimo retiro de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP). ●