La Tribuna (Los Angeles Chile)

La educación, una construcci­ón desde la base

- Alejandro Mege Valdebenit­o

La educación, fenómeno social que, como ocurre en la naturaleza, es un proceso que se inicia al nacer y es la base de un continuo desarrollo para devenir en un ser humano distinto para crear una sociedad diferente.

Hombre y sociedad, con una formación humana basada en los principios y valores, producto de lo mejor que la civilizaci­ón y la cultura de todos los tiempos han logrado selecciona­r como los más adecuados para que cada persona tenga la oportunida­d de desarrolla­r al máximo sus capacidade­s sin que el origen social, el lugar donde vive, el color de la piel, la situación económica, la religión que profese o la ideología política que defienda, constituya­n un impediment­o para alcanzar un mejor futuro.

La reforma de la educación, centrada en la discusión por la gratuidad de la educación superior -gratuidad que tiene un profundo sentido de justicia social cuando se trata de dar a todos igualdad de condicione­s en lo económico para educarseti­ene agobiado al gobierno por la urgencia del tiempo de que dispone para dar cumplimien­to a las promesas contraídas, la limitación de los recursos para hacerlo, las visiones e intereses que defienden institucio­nes y actores políticos que, con razones o sin ellas, discuten sus mejores derechos a la gratuidad.

Parece haber olvidado que el futuro de la educación superior y las posibilida­des que los estudiante­s de los sectores más vulnerable­s tengan éxito, aún contando con la gratuidad para estudiar, se empieza a construir desde el inicio del proceso educativo formal, proceso de formación que aún mantiene inalterabl­e la desigualda­d entre quienes reciben una educación de distinta calidad que condiciona fuertement­e las posibilida­des de éxito de unos y otros, y que no lo resuelve la educación superior.

Así, aun con gratuidad universal -hoy reducida y cuestionad­a por dejar sin recursos económicos a sectores que también los necesitan-, quienes logren la cima educativa serán los mismos que siempre han tenido esa posibilida­d por haber recibido una educación en los niveles parvulario­s, básicos y secundario­s de mejor calidad.

Aunque no han sido pocos qu i enes han planteado que la reforma educaciona­l debió haber potenciado con énfasis la educación en los niveles iniciales del sistema para asegurar que quienes accedan a la educación superior lo hagan con una base sólida que asegure a todos la posibilida­d de competir en igualdad de condicione­s, se optó por la educación superior, al parecer, por el impacto político inmediato que tiene. La educación básica y media, igualmente importante, no tiene la presencia ni la fuerza de presión que tiene la educación superior sobre el mundo político.

Sin bases sólidas y de calidad, todo proyecto material o humano termina por derrumbars­e, y la educación no es, ni ha sido, una excepción.

La educación básica y media, igualmente importante, no tiene la presencia ni la fuerza de presión que tiene la educación superior sobre el mundo político.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile