La Tribuna (Los Angeles Chile)
“Proponemos un nuevo sistema previsional que no vuelve al pasado”
Agustín Aburto y Juan Sarpi, de No + AFP, explicaron los detalles sobre la nueva propuesta de la entidad.
La coordinadora provincial No + AFP lleva alrededor de seis meses de incansable trabajo por la lucha en contra de las AFP y la creación de un nuevo sistema previsional, el que principalmente le otorgue una jubilación digna a quienes ya cumplieron su etapa laboral.
Este movimiento ciudadano desarrolla diversas actividades en la provincia de Biobío, asistiendo constantemente a otras en torno a esta cruzada.
Al respecto, Agustín Aburto, quien es parte del directorio de No + AFP de la provincia, contó que “No + AFP, en una nueva estrategia; nunca ha estado desaparecida de las acciones; para que la ciudadanía sepa, nosotros todos los 12 de cada mes nos reunimos en Santiago; cada organización envía su representante, por lo tanto, tenemos reuniones mensuales, evaluamos lo que se está haciendo respecto a la situación de las AFP. También tenemos reuniones regionales que son los 15 de cada mes”.
PRINCIPALES DUDAS DE LA CIUDADANÍA
En tanto, consultado sobre las principales dudas que se han podido captar por parte de la comunidad con respecto a este tema, Juan Sarpi, ingeniero civil industrial, quien colabora con este movimiento ciudadano, explicó que “aquí habría que hacer un poco de historia y promesas incumplidas. Cuando partió el sistema de AFP se dijo, en general, que la tasa de reemplazo o la jubilación en realidad iba a ser el equivalente a un 70% de los sueldos; el tema es que al final, la tasa de reemplazo real que tenemos hoy en promedio está en un 30% o cercano a eso, y gran parte de la población está percibiendo jubilaciones inferiores a los 200 mil pesos, incluso algunos inferiores a $100 mil, y comprenderán que para una persona adulta que ha trabajado toda su vida, muchas veces, llegando a la tercera edad, no tiene ni siquiera para comprar sus medicamentos”.
Uno de los puntos que se cuestiona a este sistema previsional es que durante todo el periodo en que las personas han entregado su dinero a las AFP, este se trabaja con grandes grupos económicos, y también con muchísimas utilidades, con muchas ganancias.
Al respecto, Sarpi manifestó que “el tema es que bajo mi punto de vista, si bien es cierto aparentemente con toda la publicidad engañosa que hay, desde que partieron con las AFP esto es un sistema para la jubilación, pero yo lo que veo es un sistema para recaudar recursos cuantiosos en forma obligatoria entre todos los ciudadanos que tienen alguna actividad o ingreso, y que esos recursos se facilitan a las grandes empresas para que ellas, a un costo muy barato, puedan trabajar y poder capitalizar, entonces, las grandes empresas hacen lucro, ganancia de esto con la plata de todos los chilenos, y también los administradores o dueños de las AFP, que hoy no son empresas nacionales, sino extranjeras, principalmente norteamericanas”.
LA NUEVA PROPUESTA
“El nuevo sistema previsional para Chile es un sistema, como dice, nuevo, no es volver a lo antiguo o al pasado; cuando dicen que estamos propo- niendo un sistema que vuelve al pasado, no es así, porque antiguamente la gente estaba en diferentes cajas, más de 15, y este es un sistema donde el instituto organiza a todos estos trabajadores con un sistema de previsión social”, enfatizó Agustín Aburto.
Agregó que lo segundo consiste en tres pilares fundamentales, que son el aporte del trabajador, del empleador, y consideran que el Estado también tiene que tener su aporte.
“Es principalmente necesario tener este nuevo sistema de previsión porque sinceramente, actualmente como está organizada la AFP, para las organizaciones de nuestros jubilados es imposible que con ese 10%, y la forma con la que se lleva a cabo la administración de este, podamos tener jubilaciones dignas para la gran mayoría de los trabajadores. Un sistema que para la gran mayoría, al 75% de los trabajadores de este país, este sistema de AFP no le va a entregar nunca una jubilación digna”.
Del mismo modo, Sarpi sostuvo que “las AFP en general, a pesar de toda la información engañosa que ellos presentan, no han dado el ancho, y estos gobiernos han ido haciendo algunas modificaciones, las que en vez de ayudar a los cotizantes o afiliados, han ayudado sólo a que los dueños de estas administradoras les permitan tener mayores ganancias y mayor lucro. Por lo tanto, está claro que el sistema no resiste más maquillaje, ni arreglos, y hay que terminar con el sistema de AFP”.
En esta misma línea, Juan Sarpi recalcó que lo importante aquí es que los trabajadores y distintas organizaciones se han reunido y han planteado una propuesta seria, hecha por gente que tiene conocimiento en el tema.
“Consiste en una propuesta que tiene tres pilares, como se explicó anteriormente, es como si tuviéramos una mesa con tres patas, donde la primera es obviamente el afiliado, quien tendría que entrar a cotizar un 9% para la jubilación. Hoy se descuenta el 10%, lo que significa una rebaja del 1%; por otro lado tenemos la segunda patita que es la del empleador, el que tendría que cotizar un 9%, y la tercera patita la compone el Estado, en donde tendría que cotizar un diferencial que no está hablado en porcentaje, sino que aquí se juntan los recursos, se hacen las jubilaciones con base en un conocimiento concreto, y cada persona va a saber con cuánto va a jubilar, en relación con sus últimas cotizaciones y los años que estuvo cotizando”.
DESDE EL SUELDO MÍNIMO
De acuerdo a la propuesta, nadie recibiría menos que el sueldo mínimo, lo que corresponde a $277.160. Aquí hay que considerar distintos tipos de jubilaciones, aquellos que han cotizado y aquellos que nunca han cotizado en su vida; son estos últimos los que van a tener una pensión equivalente al sueldo mínimo.
Hay que tener presente que en la situación real con la gente que ha cotizado, por las lagunas que existen y los precarios salarios, en general mucha gente debería jubilarse por el sistema de AFP con 30 o 40 mil pesos, y no lo hacen así porque existe el pilar solidario, donde el Estado aporta la diferencia para que estas personas lleguen a un valor cercano a los 100 mil.
“Por lo tanto, lo que en un principio se dijo, que las AFP iban a solucionar los problemas, eso no es así, porque finalmente estas ponen una parte, que es simplemente lo que uno logró juntar, y la otra parte la pone el Estado, y eso es muy significativo en lo que corresponde a recursos propios del fisco”.
Añadió que “esto tendría que subir a la larga, y con el aporte que ya no sería de un 10%, si no de un 18%, más la diferencia que ponga el Estado, se llegaría a la tabla de jubilaciones. Ahora hay una tabla que fija un máximo y mínimo; una persona que tenga un año cotizado, a lo menos percibiría 270 mil pesos, y allí sigue subiendo”, concluyó.