El amor debe vencer a los prejuicios

Como un paso histórico hacia la igualdad plena calificó la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, la firma del proyecto de ley sobre Matrimonio Igualitario, normativa que viene en actualizar un concepto que data de 1855.

Continuamos avanzando gradualmente hacia la inclusión e igualdad, destacando en primer lugar la aprobación en 2015 de la Unión de Acuerdo Civil, que a la fecha ha permitido que 3.082 parejas de un mismo sexo celebren este acuerdo.

Sabemos que para la igualdad plena debemos dar un paso más. No puede ser que los prejuicios continuos sean más fuertes que el amor. Por eso, hoy Chile da un paso histórico al firmar este proyec- to de ley, pues la igualdad no admite matices ni prejuicios; y lo hacemos bajo la certeza que no es ético ni justo vulnerar derechos esenciales sólo porque el mismo sexo tenga una pareja.

La iniciativa, entre otros puntos, modifica la definición de matrimonio del artículo 102 del Código Civil, estableciendo que se trata de la unión de dos personas, eliminando la referencia que establece el vínculo entre un hombre y una mujer. Se eliminan, asimismo, las referencias al “marido” y a la “mujer”, para ser reemplazados por el término neutral “cónyuge” o “cónyuges”.

La Presidenta Bachelet fue muy clara es destacar que esto significará que indistintamente un matrimonio homosexual o heterosexual podrá adoptar a un niño o niña, sin necesidad de modificar la Ley de Adopciones.

Además, se elimina la conducta homosexual como causal de divorcio por culpa, y se elimina el requisito de diferencia de sexo para validar en Chile un matrimonio celebrado en el extranjero. Con esta normativa, en definitiva, estamos protegiendo a todas las familias chilenas en su diversidad, en sus derechos.

Hoy se anteponen los derechos por sobre la arbitrariedad y también los derechos por sobre la discriminación, pues Chile avanza hacia una sociedad de más derechos civiles. Las personas no deben porqué ser discriminadas en función a su identidad de género u orientación sexual, sobre todo en algo tan importante como es la familia, núcleo de la sociedad; es entregar la dignidad que les corresponde.

Estamos cumpliendo el compromiso con las organizaciones de la diversidad, con el país y con quienes confiaron en la palabra de la Presidenta Bachelet. Hoy se da cumplimiento al compromiso presidencial de avanzar hacia una sociedad en que no exista espacio a la discriminación.

Con esta iniciativa damos un nuevo paso para lograr la misma dignidad, bienestar y protección de todas nuestras familias. Es un avance para evitar todo tipo de discriminación, reconociendo a todas las personas los mismos derechos.