La Tribuna (Los Angeles Chile)
Nuestras Educadoras de Párvulos contribuyen día a día a un mejor país
Desde 1992, el 22 de noviembre se celebra en Chile el “Día de la Educación Parvularia y de la Educadora y Educador de Párvulos”. En un comienzo este día se llamaba “Día de la Educación parvularia”, pero su nombre fue modificado, incluyendo también a nuestras educadoras de párvulos y educadores. El día escogido se debe a que el 22 de noviembre fue creada definitivamente la pri- mera Escuela de Educadoras de Párvulos, perteneciente a la Universidad de Chile. Se le debe llamar educadora de párvulos y no utilizar la palabra parvularia porque es una profesional que se prepara para aprender no sólo los saberes propios de la pedagogía sino que también investiga, reflexiona, y propone de acuerdo al contexto sociocultural en el cual se inserta para enseñar. La educadora de párvulos juega un papel muy importante en el crecimiento de un niño y niña, ya que es ella quien mantiene un contacto directo durante todo el aprendizaje desde los 84 días de vida, a través de un clima afectivo nutritivo, armónico y complementa la crianza de los padres estableciendo las bases del posterior comportamiento adulto y las capacidades para pensar y sentir.
Como nunca antes hemos avanzando en relevar el impacto de la Educación Parvularia. El gobierno moder- nizó el sistema de educación inicial a través de la Ley de Nueva Institucionalidad para la Educación Parvularia, el cual creó una Subsecretaría y una Intendencia. Esto significa que el nivel de educación inicial tiene por primera vez mayor reconocimiento en el sistema educativo. Se ordenó y modernizó el sector, separando las funciones de diseño de políticas, de fiscalización, de evaluación y de provisión del servicio. Aumentamos la cobertura en educación parvularia a través de proyectos para ampliar y mejorar la atención desde la sala cuna, creando más empleos para nuevas profesionales dedicadas a los niños y niñas. Fomentamos la lectura desde la primera infancia. Asimismo, la política de formación continua a cientos de educadoras de párvulos y técnicos para el fortalecimiento de los equipos pedagógicos. Creación de la Editorial Junji para potenciar el liderazgo educativo a partir de la experiencia y saber institucional acumulados. Incorporación de metodologías lúdicas en el proceso de enseñanza y aprendizaje a nivel de educación parvularia. Es a través del juego como los niños y niñas se comunican, es su lenguaje natural, su forma de divertirse, aprender y conocer el mundo. Y avanzamos hacia un Programa Educativo Institucional más pertinente a los estándares necesarios en este nivel educativo como parte de la Reforma Educacional.
Y en nuestro país tenemos a profesionales preparadas y las nuevas generaciones también pueden estudiar esta gran profesión porque la educadora de párvulos posee un rol muy importante en la formación y es una figura referente de cualquier niño o niña en conjunto con la familia. También, cuenta con la habilidad de comprender y conocer cómo es un niño/a y desde ahí, trabajar todo tipo de técnicas y medios para su desarrollo.
La importancia del desarrollo infantil desde la cuna se encuentran ampliamente estudiada por las neurociencias, y cada vez existe más conocimiento basado en la evidencia que permite argumentar las razones para preocuparnos de la calidad de las experiencias interpersonales y el contexto en el que viven los niños y niñas desde que nacen. Es en esta etapa donde se forjan las capacidades de adaptación al entorno y de organizar nuevos aprendizajes, de sentir diferentes emociones y de regularlas, de enfrentar tensiones a través de una autoestima fuerte. De esta forma, el gran trabajo de las educadoras de párvulos contribuye día a día a construir un mejor país. Estoy muy feliz de poder saludarlas, relevar su profesión y agradecer a cada una de las educadoras de párvulos la vocación de servicio para el presente y futuro de cientos de niños y niñas.