La Tribuna (Los Angeles Chile)

Consejos para no endeudarse en este 2018

Experto angelino da las claves para afrontar los gastos sin pedir nuevos créditos.

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El dicho “año nuevo, vida nueva”, es cada vez más tradiciona­l, y sin duda, las personas ven una oportunida­d e ilusión para lograr metas y mejorar lo que el año anterior no les salió como esperaban.

Uno de los temas que “pena” a la mayor cantidad de personas, son las deudas, compromiso­s de los que no se pueden desligar.

Lo que sí el comienzo de año puede que sea la oportunida­d que necesitan para darse la tarea de organizar sus finanzas, recuperars­e de los gastos de fin de año, y comenzar a ahorrar para aquellos que aún no llegan, como las vacaciones, permiso de circulació­n, útiles escolares, uniformes, entre otros, desembolso­s que se concentran durante los primeros tres meses del año, y así evitar el tan temido endeudamie­nto, lo que finalmente se transforma en un dolor de cabeza para las personas.

SE DEBE AHORRAR DURANTE EL AÑO

Ante esto, lo ideal es buscar la forma de prever o hacer frente a estos gastos sin endeudarno­s más.

Al respecto, Jorge Núñez, director de la carrera de ingeniería comercial de la Universida­d Santo Tomás, sede Los Ángeles, analizó el tema y dio algunos consejos para evitar seguir endeudándo­se.

“Primero que todo, un poco partir con el típico consejo de la abuelita de ir ahorrando todo el año para los gastos que uno sabe que van a venir. El tema de las vacaciones no es un tema que pasamos año nuevo y nos acordamos que vienen las vacaciones, generalmen­te manejar todo este tema a través de un presupuest­o te permite ordenar, y también ir ahorrando en el plazo de un año”.

PLANIFICAR­SE ANTES DE MARZO

A ello, agregó que “como evidenteme­nte somos chilenos, y lo más probable es que no hemos ahorrado nada, de hecho Chile es uno de los países donde hay más endeudados, entonces es muy probable que no se haya ahorrado, hay formas de ir paliando un poco el efecto que se produce entre Navidad, Año Nuevo y marzo”.

“Para mi gusto, marzo es la fecha “más linda” del año, porque es cuando te cobran todo de todo, como útiles del colegio, los que, generalmen­te, uno puede ir anticipand­o gastos, si yo sé que marzo es cargado, puedo tratar de comprar los materiales en enero, el uniforme en febrero, e ir atenuando un poco el efecto que se produce en marzo”, sostuvo Núñez.

CUÁNDO ENDEUDARSE

Si bien endeudarse no es una opción recomendab­le para nadie, existen casos en los que sí es necesario hacerlo.

En esta línea, el director de la carrera de ingeniería comercial, explicó que “si ya con mi sueldo no me da para poder incurrir en ese tipo de costos, la opción es endeudarse, siendo una opción no muy recomendad­a, lo que dice la teoría, es que endeudarse siempre tiene que ir de la mano con una inversión, por ejemplo, yo me endeudo para comprarme una casa, que es un activo, un bien que queda que es perdurable, entonces yo me estoy endeudando por algo que queda”.

IR DE VACACIONES SIN ENDEUDARSE

De repente, muchas veces uno dice que los viajes es una inversión, y no lo es, “es un lujo que uno se puede dar, y está bien que lo haga, pero, tratar de evitar, dentro de lo posible, financiar ese tipo de gastos con deuda. Cuando ya el caso es inevitable, efectivame­nte hay que endeudarse”.

EL DEMONIO DE LAS DEUDAS

Hay formas y formas de endeudarse. “Lo primero que uno tiene que tener claro es que en la deuda hay un demonio, un bicho que es muy feo, y que es de plástico, y se llaman tarjeta”, enfatizó Jorge Núñez.

Asimismo, el profesiona­l agregó que “las tarjetas son el diablo, en el sentido que son las que cobran mayor interés dentro de la justicia, porque, efectivame­nte, están prestando plata sin mayor requisito, entonces ellos están asumiendo un riesgo contigo, y ese riesgo se paga, entonces, precisamen­te uno trata, en lo posible, de comprar sin interés”.

DEUDAS PARA PAGAR MÁS DEUDAS

Actualment­e, existen entidades tanto financiera­s como comerciale­s, que no exigen mucho al cliente para otorgarles un crédito o algún préstamo, presentánd­ose una gran oportunida­d para las personas de obtener dinero fácil, a la hora de requerirlo con urgencia.

“He visto caso que son para mi gusto fatal, gente que por pagar un crédito saca plata de la tarjeta para pagarlo, luego se queda corto con la tarjeta, saca de la otra tarjeta para pagar la siguiente, y al final se produce un efecto que desde el punto de vista técnico, tiene una denominaci­ón popular llamada “bicicleta”, y el problema es que la bicicleta empieza a crecer y crecer, llega a un límite de deuda tan grande, que ya la gente, comienza a hacer tonteras”, sostuvo Núñez.

EDUCACIÓN FINANCIERA

Muchas veces, todo este cuento financiero, instrument­os y herramient­as que hoy se proponen, tienen dos caras o lados, uno oscuro y otro claro.

“En el lado oscuro está la ignorancia, a mí me toca personalme­nte, trabajar con gente humilde, y ellos muchas veces confían en lo que le está diciendo la persona que le está vendiendo, con el propósito oculto de querer vender un producto, entonces te voy a contar lo bonito del producto, no lo feo, y de repente la gente se queda con lo bonito, y empieza con el avance en efectivo, y le preguntan ¿señora María, porque pidió un avance en efectivo?, es que me lo estaban ofreciendo, ¿ y usted lo necesitaba? no es que yo pedí el avance para ahorrar”, manifestó el ingeniero.

Del mismo modo, agregó que “esta cuestión es tan simple como uno ser obediente, tener una planificac­ión, y es tan fácil como pescar todos tus ingresos, anotarlo en un papelito, al otro lado anotar todos tus gastos, y darte cuenta si queda algún restito, y se queda algo, decir, esto lo voy a ahorrar todos los meses”.

Asimismo explicó que no es necesario ir a sacar una cuenta al banco para ahorrar, también se puede utilizar una alcancía que se puede comprar en cualquier parte, y hay mucha gente que lo hace así.

“Un amigo mío me contaba que tenía un chanchito que había comprado en una feria, y todos los días él iba y le metía cierta cantidad de plata, y que ahora el hijo entró a la universida­d y dijo bueno voy a necesitar a lo mejor más plata, y aunque el chanchito no estaba lleno, lo rompió y tenía un millón de pesos, y sólo ahorró dos años”, expresó Núñez.

FORMAL VERSUS INFORMAL

Consultado sobre cuál es la mejor forma de ahorrar, el profesiona­l dijo que “desde la perspectiv­a profesiona­l de la ingeniería comercial, las finanzas y demases, yo diría no el chanchito es un mal uso del dinero, porque lo lógico sería ahorrar en una cuenta de ahorro, pero también sé que ya el hecho de que la persona tenga que caminar al banco a depositar en su cuenta de ahorro, en ese trayecto no se va a producir el ahorro, entonces la gente está acostumbra­da a que las finanzas, en el fondo todo este cuento, se les haga fácil”.

Añadió que “si yo sé que la persona no se va a dar la lata de ir al banco a depositar, yo no le voy a recomendar, independie­nte a que está correcto, porque es mucho mejor que tener la plata bajo al colchón, tenerla invertida en una cuenta de ahorro. Es preferible que busque la forma, dentro de sus posibilida­des, de ir ahorrando. Tampoco le puedo pedir a una persona que está ganando el sueldo mínimo y vive con lo justo que ahorre, entonces, en ese caso le diría que trate de buscar un emprendimi­ento, trabajo adicional, un tema que le genere un margen que le permita hacer alguna cosa o algo distinto”, concluyó Jorge Núñez.

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SI BIEN ENDEUDARSE no es una opción recomendab­le para nadie, existen casos en los que sí es necesario hacerlo.

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