Combativa inmigrate escaló la Estatua de la Libertad
El miércoles 4 de julio, en plenas celebraciones del Día de la Independencia de Estados Unidos, una inmigrante se transformó en la mujer que escaló la Estatua de la Libertad para protestar contra la política inmigratoria de Donald Trump, generando conmoción en el país norteamericano.
A unos 30 metros sobre el piso, la manifestante desafió durante unas cuatro horas a las autoridades, antes que dos agentes del Departamento de Policía de Nueva York subieran a la base, le pusieran arneses y la bajaran ocho metros hasta el mirador de la estatua, en donde fue detenida.
La manifestante fue identificada como Theresa Patricia Okoumou y dijo a la policía que no bajaría hasta que “todos los niños sean liberados”, en protesta por la separación de menores inmigrantes de sus padres en la frontera con México.
La mujer de 44 años creció en la República Democrática del Congo y se mudó hace más de diez años a Nueva York, donde trabaja como entrenadora personal, además de haberse desempeñado como fisioterapeuta.
Ésta no es la primera vez que esta mujer está en el centro de la polémica o que debe asistir a tribunales. En 2003 presentó una demanda contra el hogar para mujeres maltratadas “Safe Horizons”, por presuntos incidentes de abuso contra una agencia de servicios sociales, según recoge Daily News.
La manifestante había acusado despido injustificado y discriminación, mientras que su jefe se quejó que ella fue grosera con otros empleados y clientes del lugar, recoge el medio, de acuerdo con registros judiciales. La mujer perdió el caso luego que tuviera que representarse a sí misma tras la renuncia de su abogado.