¿Cómo vivir sin producir basura?
Te sugerimos algunas acciones, sencillas y prácticas, para que generes menos plástico y dejes una huella positiva en el planeta a partir de los consejos de Laura Singer, creadora del movimiento Zero Waste
Una idea puede cambiar el mundo. Esto es lo que está demostrando la joven estadounidense Laura Singer, quien con su proyecto Trash ir for tossers empodera a las personas a través de redes sociales y charlas sobre la importancia y la necesidad de vivir generando menos desperdicios.
Aunque algunos pudieran pensar que llevar este estilo de vida, que pudiera sonar un tanto radical, conlleva una inversión monetaria significativa, no es así. En este artículo queremos compartirte algunas ideas que seguramente podrás aplicar en tu día a día sin mayores complicaciones.
Prepara tu café en casa
Cada vez que compras esta bebida estimulante que a muchos enamora, te la sirven en un envase de plástico, a menos que te detengas en un restaurante. Mientras que si te tomas unos minutitos para prepararla y consumirla en casa, ya no será necesario el desperdicio de estos materiales que pueden tardar cientos de años en degradarse. Esto también aplica para la comida en general, con el objetivo de generar menos contenedores. Primero, te aseguras de qué estás consumiendo y, segundo, empiezas a ser parte del cambio.
Intercambia tus libros
Reúnete con tus amigos e intercambia con ellos esos libros que ya leíste por aquellos que te faltan por leer. Sabemos que algunas obras, sobre todo las más contemporáneas, pueden ser costosas. Es importante que quienes integren ese grupo de lectura sean personas con gustos afines para que sí sea posible el trueque literario.
Utiliza bolsas reusables
Obvia las bolsas de plástico y empieza a optar por las de tela. Sabemos que ésta es una de las prácticas que ya cientos de personas están adoptando y que, incluso, algunos supermercados están promoviendo. Poco a poco puedes hacerla parte de tu rutina hasta que se convierta en un hábito.
No más papel
Dile adiós a las toallas de papel y empieza a ocupar las del algodón o a buscar esos recortes de tela que no tienen ningún uso en tu casa. También te pueden servir esas camisetas que están muy gastadas para venderlas o regalarlas.
Botellas de cristal
Hidrátate sin hacer uso de envases plásticos; imagina cuantos kilos generas con cada botella que compras. Puedes sustituirla por frascos vacíos de mantequilla de maní, de pasta de tomate o de aceite orgánico. Lávalos y reutilízalos cada vez que sea necesario.
Menos maquillaje
Las mujeres en México son muy asiduas a un elevado consumo de maquillaje. Basta, para tener más o menos una idea, subirse al metro a las 7:00 de la mañana para ver cómo este medio de transporte se convierte en una estética o un camerino. Según un estudio de Euromonitor Internacional la industria de la belleza cada año crece un 11% en México y 79% de la población hace uso de estos productos. Para algunas puede representar un esfuerzo extraordinario, pero queremos invitarte a simplificar tu rutina de belleza. Puedes empezar con no maquillarte todos los días de la semana o utilizando el aceite de coco como desmaquillante o brillo de labios.
“En mi casa fuimos muy humildes. Por eso en mi familia siempre tuvimos cuestiones muy fuertes de cuidado con el lugar que teníamos; con la tierra” Anitta