Turista monótono
Humberto Rivas, académico de la Escuela de Excursiones y Ecoturismo de la U. San Sebastián, dice que en el informe “se aprecia una creciente democratización del turismo, pero aún queda un importante segmento de chilenos que aspira a disfrutar de nuestros paisajes. Más acceso al turismo es un imperativo”, señala.
Sin embargo, y más allá de los números, el experto hace énfasis en la pata coja del turismo: los pocos destinos que acaparan gran parte de la atención. “No es sorpresivo que los lugares pre- feridos se consoliden”, dice Rivas, agregando que “esto conlleva distintos desafíos de planificación y gestión en destinos, tanto rurales, como urbanos”.
Es más, casi el cuarto de los viajes que implican pernoctación (23,7%) tienen como destino a la Región de Valparaíso, mientras que la Región del Biobío es la única que también supera los dos dígitos (12,2%). Es decir, la mayoría de las atracciones la acaparan los mismos de siempre: Coquimbo y La Serena, el llamado “litoral de los poetas”, además de Concepción y el Santiago urbano.
“Es un nuevo llamado de atención a la sustentabilidad. Debemos ser muy cuidadosos en la sobremasificación de los núcleos costeros, y seguir trabajando en fomentar buenas y mejores prácticas en turismo de naturaleza, cultural, ampliar la oferta en montaña y zonas costeras en nuevas localidades que permitan desconcentrar los actuales destinos tradicionales”, opina el experto.
“Lo más importante es que existan más y mejores cifras para poder realizar acciones e impulsar el turismo interno. Una forma de lograrlo es desarrollando los destinos turísticos y diversificando las experiencias, para que el turismo sea más atractivo”, dice la representante de la Fedetur.