Vuelve el torneo nacional: Ahora, a definir al campeón…
A dos fechas del final del certamen local, te presentamos la “calculadora de la fe” de los candidatos al título. Sólo la UC podría levantar la copa este domingo
El fútbol chileno está en su recta final y este domingo podría tener nuevo monarca. Universidad Católica se mantiene como líder del Campeonato Nacional a dos fechas del cierre del torneo con 55 puntos, sacándole dos unidades de ventaja a Universidad de Chile, tres a Universidad de Concepción y seis a Deportes Antofagasta.
El único que depende de sí mismo para ser campeón es la UC, que puede alzar la copa del fútbol chileno por tercera vez en los últimos cinco torneos, incluso este fin de semana, si es que vence a O’Higgins y se dan un par de resultados adversos para sus seguidores.
En nuestra “calculadora de la fe” del fútbol chileno, les explicamos cómo los de Beñat San José o alguno de sus rivales pueden levantar la copa en las próximas dos jornadas de la Primera División.
La “calculadora de la fe” del fútbol chileno: 1 U. Católica ( 55 puntos): O’Higgins ( L, fecha 29) y Deportes Temuco ( V, fecha 30)
Para la UC, la ecuación es simple: gana los dos partidos y es campeona, sin necesitar de otros resultados. Los de Beñat tienen el futuro en sus manos para bajar su estrella 13.
Los “cruzados” también pueden ser campeones sumando cuatro unidades, si es que obtienen el mismo o mayor puntaje que la “U” en estos dos partidos. Incluso, podrían coronarse con una derrota y un triunfo, o sea, tres puntos, si es que igualan o mejoran las cifras de los azules y la U. de Concepción no gana sus dos partidos.
Con dos empates, la UC igual puede gritar campeón, si es que la “U” y el “Campanil” no sacan cuatro y seis puntos, respectivamente. Hasta con una y ninguna unidad podría lograrlo, si es que sus tres perseguidores pierden todos sus duelos.
2 U. de Chile ( 53 puntos): Deportes Iquique ( L, fecha 29) y Curicó Unido ( V, fecha 30)
La “U”, en una remontada espectacular, se metió en la lucha por la corona y podría alzar la copa de manera notable en el caso de ganar sus partidos y que la UC pierda uno de los dos, o sea, si gana tres puntos más que los “cruzados” en estas dos jornadas.
Los azules también pueden conseguirlo en el caso de sumar cuatro unidades, pero para eso deben esperar que la Católica sume apenas un punto o menos y que la U. de Concepción no gane sus dos partidos.
Si los laicos suman tres, o sea, un triunfo y una derrota, necesitarían un milagro. Éste implica que los “cruzados” pierdan sus dos partidos y que el “Campanil” no logre más de tres puntos. Con dos empates, los de Frank Kudelka sólo podrían optar a una final con su archirrival “cruzado”, esperando una serie de resultados. Con una o ninguna unidad, no tienen
chances.
3 U. de Concepción ( 52 puntos): San Luis ( L, fecha 29) y Colo Colo ( V, fecha 30)
El equipo de Francisco Bozán aún sueña con su primer título en la Primera División de nuestro fútbol. Para eso, debe ganar sus dos partidos finales, que la UC no sume más de dos puntos y que la “U” no se lleve más de cuatro unidades. Con cuatro puntos, el “Campanil” necesita que Católica pierda sus dos partidos y que la “U” no sume más de dos unidades. Si los de Beñat, en este escenario, suman un empate y una derrota, habría final entre la U. de Concepción y la UC. Con tres puntos, los “penquistas” sólo pueden optar a una final contra Católica como mejor escenario. Con menos de tres unidades, no tienen chances de campeonar.
Deportes Antofagasta ( 49 puntos): Unión Española ( L, fecha 29) y Deportes Iquique ( V, fecha 30) La única forma de que Antofagasta sea campeón es en una final contra la UC. Para eso, debe ocurrir un verdadero milagro, un desmoronamiento de los rivales que están por encima: que los “Pumas” ganen ambos partidos, que Católica pierda los duelos que le restan, que la “U” no sume más de dos puntos y que el “Campanil” no logre más de tres.
De ocurrir esto último, se provocaría una increíble cuádruple igualdad en 55 puntos y los “Pumas” tendrían la ventaja por su diferencia de gol, primer criterio de desempate para optar a una final que definiría al campeón.