Los números del fin de semana sangriento
Dos días después de que el plan de la oposición venezolana, respaldada por Estados Unidos, para introducir ayuda humanitaria a Venezuela derivara en varios enfrentamientos cuando las fuerzas leales a Maduro impidieron la entrada de los camiones y se enfrentaron con la gente que acompañaba los cargamentos, al menos cuatro personas murieron y más de 300 resultaron lesionadas.
El gobierno de Colombia informó que 167 miembros de las Fuerzas Armadas de Venezuela, entre militares y policías, han pedido protección a este país mientras huyen del gobierno de Maduro.
De acuerdo a Migración Colombia, en los últimos dos días llegaron uniformados de la Guardia Nacional, y la Policía Nacional Bolivariana, entre otras. De este grupo, varios estaban acompañados por sus familias por temor a las represalias.
Militares de Brasil y Venezuela negociaron para evitar la repetición de enfrentamientos entre fuerzas de seguridad venezolanas y ciudadanos de ese país en territorio brasileño, informó el ministerio de Defensa brasileño en una nota la noche del domingo.
Manifestantes en la ciudad de Pacaraima, en el estado brasileño de Roraima, limítrofe con Venezuela, arrojaron piedras a las tropas venezolanas, que respondieron con perdigones y gases lacrimógenos que llegaron a suelo brasileño.
Un militar brasileño avanzó solo hacia la línea de frontera para pedir calma a los soldados venezolanos y pidió a periodistas y manifestantes que retrocedieran y se pusieran a resguardo.
Después, un grupo de soldados brasileños improvisó un cordón para intentar aplacar los enfrentamientos cerca de la línea de frontera y mantener a los manifestantes alejados de los miembros de la guardia nacional venezolana.
Una vez que el conflicto cesó, decenas de seguidores de Maduro llegaron a la frontera venezolana e izaron la bandera de Venezuela, que había sido retirada ayer en uno de los momentos más álgidos de choques a ambos lados de la frontera. Tras gritar contra la ayuda humanitaria y el presidente norteamericano Donald Trump, los seguidores del presidente venezolano se fueron.
Por otra parte, el gobierno de Roraima anunció que el lunes decretará estado de “calamidad pública” debido al colapso en el sistema de atención a la salud, luego del ingreso en masa de venezolanos heridos en episodios de violencia en la frontera, según las autoridades.
Un total de 22 venezolanos debieron ser internados con heridas de balas de fusil y perdigones en Boa Vista, capital de Roraima, luego de un día de máxima tensión y enfrentamientos en la frontera. De ellos, 18 debieron ser intervenidos quirúrgicamente.