Arlén gana la batalla: será la primera alumna trans en Liceo 1 de Niñas de Santiago
Una historia de bullying gatilló la decisión de Arlén de solicitar ingresar a un establecimiento de mujeres. La decisión fue apoyada por la Minstra Cubillos y torció el rechazo de la Municiaplidad de Santiago de no aceptar su matricula.
“No saben lo feliz que estoy. Esto se logró gracias a todos ustedes”. Con una sonrisa y evidentemente emocionada, Arlén Aliaga, estudiante trans de 17 años, anunciaba a sus seguidores de Instagram que Felipe Alessandri, alcalde de Santiago, se había comunicado con ella para entregarle la noticia que cambiará su vida: había sido aceptada en el Liceo 1 y estaba todo listo para que este lunes dé inicio al año escolar junto a sus nuevas compañeras. Con la integración de Arlén al establecimiento de niñas se marca un un hito y un precedente al convertirse en la primera alumna trans del liceo, el cual ya acumula más de cien años de historia. Sin embargo, la alegría de Arlén es proporcional al sufrimiento que tuvo que pasar durante tres años antes de ser aceptada en el Liceo 1. Los primeros años de enseñanza media los cursó en el Liceo Barros Borgoño, establecimiento de hom- bres ubicado en el Barrio Franklin. Según el relato de Arlén, en 2017 la experiencia con sus compañeros fue buena pero la relación con funcionarios estuvo marcada por roces y momentos ingratos que gatillaron su salida del liceo. Otra de las desagradables experiencias que le tocó vivir en su antiguo colegio sucedió el 2018. “Aparecí en las nóminas de segundo medio, aún no me explico por qué me dejaron repitiendo”, cuenta Arlén. “Supuestamente fue por problemas de notas, pero yo había pasado de curso. Igual lo hice de nuevo, porque no tenía las mejores notas y me favorecía”, afirma la joven. El año pasado fue parte del Centro de Estudiantes del establecimiento, lo que tensionó la relación con las autoridades del Liceo. “Cada situación que pasaba me cargaban bastante a mi o a otros estudiantes, me seguían al baño, cuandos salía de la sala, hubo un hostigamiento muy notorio de todos los estamentos, menos del estudiantado”. Para poder librarse de estos casos de hostigamiento es que postuló al establecimiento de niñas, solicitud que un primer momento fue rechaza por la Dirección de Educación Municipal de Santiago. A través de un comunicado aseguraron que era ilegal que un alumno con un sexo registral distinto al femenino pudiese matricularse en el establecimiento. “La Dem no posee herramientas legales que le permitan pasar sobre la ley, por lo que no es posible, desde el punto de vista legal, acceder a la solicitud legal de Arlén”, se leía en el texto que ofrecía la posibilidad de ingreso a la estudiante a cualquier liceo mixto de la comuna. Para felicidad de Arlén y su familia, el rechazo a matrícula no fue definitivo. La Ministra de Educación, Marcela Cubillos, rechazó la posición de la comuna y aseguró que a pesar de que los reglamentos de la Ley de Identidad de Género no estén implementados, sí existe una ley que respalda a la estudiante trans. “Ella tiene el derecho legal a estudiar en el Liceo 1”, aseguró la ministra, quien además agregó que Arién no debía ser perjudicada por un tema de plazos. Tras las pala- bras de Cubillos, Alessandri aseguró que estaban a disposición de ceder en la primera decisión si es que el Mineduc así lo solicitaba. Tras una conversación entre ambos, el humo blanco salió desde la Municipalidad de Santiago, marcando un hecho histórico para la integración de personas trans en el país.
“Tuve roces con funcionarios del liceo, tanto profesores, como asistentes de la educación, donde el tema central era que yo soy trans y estudiara en un liceo de hombres, y otros por mi expresión de género” Arlén Aliaga, estudiante trans de 17 años