“Con mis personajes quiero que los niños encuentren amigos… amigos para divertirse, pero también para aprender”
Está tras el éxito de grandes producciones animadas que tanto niños como adolescentes han amado. ¿Cómo saber qué quiere el público?
—Lo bueno es que soy una de las personas más viejas del equipo de trabajo. Entonces, normalmente estoy trabajando con personas que se encuentran entre los 20 y los 30 años. Así que ellos tienen muy claro qué está pasando actualmente y qué quiere el público, porque ellos mismos aman los contenidos animados o tienen a algún pequeño en casa que los adora.
Y bueno, muchos pensarán que soy un abuelo, pero la verdad es que también me siento a ver televisión para entender la dinámica de esta industria y qué quieren los niños.
En este momento,
es de esas producciones que enloquecen a los niños de todo el mundo. ¿Cuál podría ser el secreto o la fórmula del éxito?
—Creo que se trata de hacer posible lo que para muchos podría ser imposible, y con eso me refiero a tener una niña vampiro que no está pensando en sangre, como sucedería normalmente, sino que tiene los problemas de una niña común y corriente que se muda de su ciudad natal y debe hacer amigos en el colegio nuevo. Creo que cuando se rompen las reglas de la televisión, se pueden obtener grandes ideas, y ese es el caso de Vampirina.
¿Qué lo llevó a trabajar en el mundo de la televisión animada para los más pequeños?
—Creo que tanto de pequeños, como de grandes, todos hemos creado en nuestras mentes personajes e historias fantásticas que nos han generado pánico o emoción. Pues bueno, yo decidí que esos personajes salieran de mi mente y se convirtieran en una realidad y aquí estoy, trabajando en esto.
Vampirina,