El proyecto de La Moneda desata la batalla del 10%
La “letra chica” de la iniciativa gubernamental concentra el debate en el Congreso.
Luego de la sorpresa inicial que causó el mensaje presidencial del miércoles en la noche al Parlamento para propiciar una ley de retiro del 10% desde las AFP, ayer empezó el tiempo de las disputas.
Es que el nuevo proyecto le pelea terreno al que lleva semanas de recorrido legislativo, que surgió de una moción de los diputados Karim Bianchi y Pamela Jiles y se tramita como reforma constitucional, por lo que no satisface al Presidente Sebastián Piñera, quien ya adelantó que lo llevará al Tribunal Constitucional (TC) si llega a su escritorio.
Este jueves, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, dijo en radio Duna que “lo que está en juego es mucho más que un retiro del 10%. Están en juego las reglas de la institucionalidad. Hay que entender que la plata para mejorar pensiones no cae de Marte, tiene que salir de las cotizaciones obligatorias”.
El secretario de Estado añadió que “si no hay plata, no hay pensiones. Por eso en nuestro proyecto ponemos una serie de resguardos, pues los retiros universales sin límites y sin bordes generan un mayor forado previsional que
uno que es más acotado”.
Mientras, la presidenta del Senado, la PPD Adriana Muñoz, le salió al paso: “Lo que veo es una intervención del Gobierno para ordenar a sus parlamentarios, porque hasta ahora teníamos los votos de senadores oficialistas necesarios para aprobar el 10% que nos llegó desde los diputados. Con este proyecto del Gobierno puede presentarse una situación un poco compleja. Pero le digo a mis compatriotas que el segundo retiro va a ser una realidad, pese a que la propuesta del Ejecutivo pone límites que vamos a rechazar”.
Son cinco los senadores de Chile Vamos comprometidos con la propuesta de Bianchi y Jiles: Manuel José Ossandón y Juan Castro de RN, y los UDI Iván Moreira, José Durana y David Sandoval.
En opinión de Ossandón, “parece que el Gobierno entendió la urgencia de muchas familias con su proyecto, pero tal como está presentado no cuenta con mi apoyo. Poner condiciones para el retiro es la letra chica que ensucia una iniciativa para ayudar a la gente. Estoy dispuesto a conversar y a buscar una salida, pero sin letra chica”.
Y Moreira dijo que “valoro que el Gobierno se haya invoucrado, pero votaré en conciencia. El Ejecutivo legitimó el primer retiro al no ir al TC, y ahora confunde a la gente al cambiar al respecto. Espero que esta nueva iniciativa sea corregida aumentando el máximo a 150 UF y que además sea sin reintegro del dinero”.