Por fraude al fisco piden prisión preventiva para Cathy Barriga
Fiscalía acusó a la exalcaldesa de fundar “una política de gobernanza municipal fraudulenta”.
Su llegada a Tribunales se tiñó ayer del mismo tinte que ha tenido toda su carrera en la farándula y en la política: la polémica viral, el desparpajo, la osadía.
Cathy Barriga, exchica Mekano y también exalcaldesa de Maipú, debía comparecer ante el Noveno Juzgado de Garantía de Santiago para ser formalizada por cargos gruesos: un fraude al fisco de más de 30 mil millones de pesos en sus tiempos de jefa comunal.
Pero antes de escuchar las acusaciones del Ministerio Público, antes de siquiera entrar al palacio de Justicia, se dio tiempo para retar públicamente y ante las cámaras a su marido -el diputado UDI Joaquín Lavín jr.- increpar a los periodistas presentes en el lugar y hacer luego un ingreso sonriente, indisimulablemente televisivo, al juzgado.
Ya dentro, la sonrisa no le volvería a la cara. Las abogadas de la Fiscalía expusieron ante el juez Hugo Salgado la larga lista de conductas delictivas que se le imputan a Barriga y al final de la sesión pidieron para ella prisión preventiva.
Como instigadora de “una política de gobernanza municipal fraudulenta”, se pidió para Barriga la cautelar más exigente posible, superior a las que accedieron los otros involucrados en el caso: Luis Japaz, asesor y mano derecha de la exalcadesa y en su momento candidato UDI al sillón municipal de Renca; María Isabel Palma, directora subrogante de administración y finanzas, y luego directora subrogante de control; Ana María Cortés, exdirectora de Secplac; Andrea Díaz, exadministradora municipal; y Andrea Monsalve, supuesta periodista de confianza de Barriga.
Lo de “supuesta” no es una ironía: en su acusación, el Ministerio Público la denunció por falsificar un título de periodista de la UC (lo que la habilitaba para ser contratada), cargo que en todo caso ejerció poco y nada: tuvo 1.710 días consecutivos de ausencia por licencia médica, recibiendo sus remuneraciones en todo el periodo e incluso incrementándolo en un 39%. En octubre de 2020
se le terminó su contrato ante la imposibilidad de confirmar su diagnóstico, pero el daño al patrimonio fiscal ya estaba hecho: 110 millones de pesos.
La exposición del Ministerio Público también abordó la compra de mil collares de cristal y de 30 mil peluches, todo hecho con dinero destinado a otros fines. En el caso de los peluches, muchos de los cuales aún siguen amontonadas en un depósito de la municipalidad, se trató de una compra hecha por trato directo y con un presupuesto que tenía como fin apoyar la educación pública en la comuna.
Tampoco se trató de un hecho aislado. Barriga y Japaz se concertaron para realizar actividades propagandísticas de la gestión edilicia, incurriendo en gastos multimillonarios -el fraude fiscal exacto por el que se le acusa a Barriga son $30.622.935.635- jamás apro
bados por el concejo municipal.
Se incluyen entre estas “iniciativas”, los festivales “Maipeluza”, el pintado de un vehículo alcaldicio de color dorado, gigantografías, chapitas y poleras, la beca Cathy Barriga, una Casa de Jengibre, una plaza nevada, el evento Maipú Enamorado, y la celebración del Año Nuevo Chino.
La petición de prisión preventiva para Cathy Barriga será resuelta hoy por el Noveno Juzgado.
Casos. Entre los delitos imputados se cuenta la compra de miles de collares y peluches con platas de la comuna.