El FMI bendice el plan de Milei con cuantioso préstamo
Entregó US$ 4.700 millones a Argentina y renegoció un préstamo por US$ 44 mil millones que data de 2018. Contexto. El Fondo elogió las primeras medidas del gobierno argentino, mientras se debate la “Ley Ómnibus”.
El plan de ajuste del presidente argentino Javier Milei recibió ayer un guiño del Fondo Monetario Internacional, que giró US$ 4.700 millones y elogió al nuevo gobierno por haber tomado “medidas audaces” para restaurar la estabilidad económica y abordar problemas que obstaculizan el crecimiento y la inversión.
“Estas primeras acciones empiezan a dar sus frutos. Se están realizando los esfuerzos para construir el marco social y político que sustente al plan de estabilización”, dijo el FMI en un informe sobre el país, pero también advirtió que el camino hacia la estabilidad es complejo por las divisiones políticas en el Congreso y la
“frágil” situación social.
El texto se público un día después de la aprobación del desembolso como parte del refinanciación de un préstamo de US$ 44 mil millones
otorgado en 2018.
Se trata de la séptima revisión del acuerdo del FMI y la primera bajo la presidencia de Milei. Tuvo lugar mientras la Cámara de Diputados debate
la “Ley Ómnibus”, que Milei considera clave para el éxito de su programa económico.
Argentina recibió en 2018 el mayor préstamo otorgado por el FMI en su historia, por un monto de casi US$ 55 mil millones, de los cuales finalmente fueron desembolsados US$ 44 mil millones.
A causa de la pandemia y una sequía histórica, el gobierno de Alberto Fernández acordó a principios de 2022 un nuevo refinanciamiento por el cual el país se comprometía a cumplir una serie de metas fiscales y monetarias.
Estas pautas quedaron en suspenso desde mitad de 2023, en coincidencia con la campaña electoral que llevó a la presidencia a Milei.
En su reporte de 119 páginas, el FMI destacó que desde la anterior revisión del programa, durante la administración de Fernández, los desequilibrios “se han agudizado peligrosamente” en Argentina y el programa se desvió con políticas “muy expansivas e inconsistentes”. Como ejemplos mencionó un aumento del déficit fiscal, el agotamiento de las reservas internacionales y una galopante inflación.
Tras asumir como presidente, Milei devaluó 50% el peso y puso en marcha un plan de ajuste y desregulación de una economía que en los últimos años ha tenido una fuerte intervención estatal. Las medidas incluyen recortes del gasto público para disminuir el déficit fiscal, miles de despidos en la administración pública y la reducción de subsidios al transporte público y el sector energético.