Los “viejos estandartes” siguen echando una mano en la emergencia
Claudio Bravo esperaba en el lobby del hotel donde la selección concentra en Parma. La presencia del arquero obedecía a la guardia que había montado esperando el arribo de Eduardo Vargas. Cuando llegó el delantero de Atlético Mineiro, el portero lo recibió con un gran abrazo, delante de las cámaras, que aguardaban por la aparición del último convocado en sumarse a la concentración. Al rato, “Turboman” partió con el resto del plantel a la práctica vespertina, la primera que tiene Ricardo Gareca con todos los jugadores citados para su estreno en la banca.
Vargas, como Bravo y Mauricio Isla, son parte de la “Generación Dorada”, que hace una década casi sorprende a Brasil en su casa en los octavos trío hacía rato que no venía siendo citado, a diferencia de Alexis Sánchez, presente en esta ocasión; Gary Medel, Arturo de que la Eliminatorias se disputan con quienes estén mejor en cada ventana de partidos, la nominación del trío de “dorados” de esta ocasión señala parte del gusto del técnico.
Al margen del gran momento que vive el “Huaso” en Independiente de Avellaneda y de que había dejado la selección en la era de Eduardo Berizzo por decisión propia, el llamado de Vargas obedece a la carencia de gol que exhibe la “Roja”. Y “Edu” suele mostrar su mejor vesión en la “Roja” más allá de su escasa contionuidad en Brasil, mientras lo de Bravo se entiende desde el liderazgo, que el DT espera que el potero transunte en esta semana de trabajos.
CLAUDIO BRAVO
El arquero comentando su retorno y el de otros “dorados” a la “Roja”.