Presidente de Huachipato dice que han sufrido una “agonía de 12 años”
Empresa achaca el problema al exceso de produccción de los asiáticos, que además fomentan el “dumping”.
“Estamos muy preocupados por Huachipato, pero esto va más allá de la voluntad o no del Gobierno. Tiene que ver con cuestiones internacionales”.
Reuniones múltiples, incredulidad, banderas negras y hasta declaraciones del Presidente Gabriel Boric generó ayer el anuncio del miércoles de la suspensión indefinida de las operaciones de la planta acerera de Huachipato, ubicada en la ciudad de Talcahuano, en la Región del Biobío.
Los dueños de la histórica fábrica, inaugurada en 1950 bajo el alero de la Corfo y privatizada durante la Dictadura, dieron como razón de esta drástica medida “la competencia desleal” del acero que llega desde China, que es hasta un 40% más barato que el que ellos producen, lo que les estaba haciendo perder un millón de dólares por día.
La Compañía Siderúrgica Huachipato (CSH, del Grupo CAP) pidió junto a la empresa Molycop que al acero asiático se le aplicaran sobretasas arancelarias del 25%.
Pero el martes, la Comisión Antidistorsiones le recomendó al Gobierno fijar un promedio del 15% para bolas y barras de acero provenientes del gigante asiático. Y ello motivó la rápida y drástica decisión de la CSH, que tiene en ascuas a sus casi tres mil trabajadores y a otros 20 mil que de manera indirecta se benefician de la empresa.
“Estamos muy preocupados de lo que está pasando con CAP en Talcahuano. Es una preocupación firme del Gobierno. El ministro (de Economía, Nicolás) Grau está encargado del tema. Pero sepan que esto es algo que va más allá de la voluntad o no del Gobierno, porque tiene que ver con cuestiones internacionales. Estamos poniendo todo el énfasis y dialogando con la empresa para
poder evitar el cierre”, señaló ayer Boric.
Por su parte, el presidente del directorio de la CSH, Julio Bertrand, declaró ayer en Radio Cooperativa que “hemos vivido esta agonía desde hace más de 12 años, cuando partió el exceso de producción de China y se sumaron algunas acciones de ‘dumping’ (competencia desleal) hacia todos los mercados del mundo”.
Y añadió que la “suspensión indefinida es porque todavía estamos viendo si entramos en razón como país para darle viabilidad a esta industria y no
perdernos Huachipato, una empresa que podría aportar mucho en el futuro con el acero sostenible, verde, con circularidad y con uso de minerales de hierro chilenos”.
El ministro Grau manifestó que se iba a reunir ayer con la empresa y que el Gobierno trabajaba en un plan para encontrar una respuesta, aunque pidió que el asunto no sea entendido sólo “como una decisión política, porque eso no da cuenta de cómo funciona nuestra institucionalidad”.
“Hay que buscar soluciones alternativas que permitan la
continuidad operacional de Huachipato, más allá de que sea una empresa privada”, explicó el ministro.
Y los municipios de la Provincia de Concepción se declararon en alerta por la tragedia laboral derivada del inminente cierre de Huachipato. Debido a ello, los alcaldes decidieron izar banderas negras en las dependencias de los municipios y lo mismo pasó en el edificio de la Gobernación Regional, tras una reunión con los trabajadores afectados en la Región del Biobío.
GABRIEL BORIC Presidente de Chile