Trump consolida candidatura y busca revertir rechazo antes de definición con Hillary
John Kasich siguió los pasos de Ted Cruz y ayer suspendió su campaña, mientras crecen expectativas de que se convierta en el compañero de fórmula de Trump.
— Cuando el 16 de junio de 2015 Donald Trump anunció su candidatura a la presidencia de EEUU, pocos le prestaron importancia. Hoy, a poco menos de un año, son pocos los que se atreven a descartar que el candidato republicano pueda convertirse en el próximo presidente de Estados Unidos. Con Ted Cruz y John Kasich fuera de carrera, el magnate aseguró ayer su nominación y vuelve a poner a prueba su fortaleza ante los nuevos desafíos: revertir su actual rechazo de 62% y unificar al partido republicano detrás de su figura.
El fenómeno Trump no deja de dar sorpresas. El lunes la encuestadora Rasmussen Reports reveló los
¿Qué ha pasado? Tras la suspensión de las candidaturas de Cruz y Kasich, Trump es el presunto candidato republicano a la Casa Blanca.
¿Qué desafíos enfrenta? Tiene que convencer a varios de líderes republicanos que no lo ven con buenos ojos. Además debe revertir el alto rechazo en su contra.
¿Qué tiene a favor? Analistas consideran que el fenómeno de Trump es fuerte y no se animan a descartar que se convierta en el próximo presidente de EEUU. Apoyo a Trump. Phil Bryant, gobernador de Missisipi, y Newt Gingrich, ex vocero de la Cámara de Representantes, dson algunos de los republicanos que dieron ayer su apoyo a Trump. primeros sondeos que lo favorecen frente a Hillary Clinton, con el 41% de la intención de voto a su favor frente al 39% de la precandidata demócrata. Al mismo tiempo, las palabras del presidente del partido, Reince Priebus, que llamó a la unión detrás de Trump y en contra de Clinton, tuvieron eco en otros líderes conservadores.
“Como un verdadero patriota, voy a apoyar Donald Trump para impedir que Hillary Clinton se convierta en la presidenta de Estados Unidos”, señaló ayer Phil Bryant, gobernador de Missisipi.
“Trump es probablemente el más efectivo líder anti izquierda de nuestros tiempos”, indicó Newt Gingrich, ex presidente republicano de la Cámara de Representantes y ex candidato a la nominación presidencial en 2012.
No son pocos los que ahora se quieren subir al carro de la victoria. El propio Trump señaló en una entrevista a Fox: “no he parado de recibir llamadas de gente que dijo cosas horribles de mí pero que ahora se nos unen”.
No obstante, no son pocos los conservadores que le hacen la guerra al candidato. “Creo que Donald Trump ha demostrado ser desequilibrado y singularmente poco calificado para ser presidente. No lo voy a apoyar”, señaló Stuart Stevens, ex estratega número uno de Mitt Romney, candidato presidencial republicano para las elecciones de 2008.
En tanto, las caras más visibles del establishment del partido, como el mismo Romney, Joe Biden, John McCain y Jeb Bush, entre otros, han guardado silencio tras la victoria de Trump en Indiana que le dio el ticket a la elección general.
“Hay un grupo nada despreciable de republicanos, representantes, senadores, gobernadores, ex candida- tos presidenciales, que han dicho que no apoyarían a Trump. En este nuevo escenario ellos tienen varias alternativas: pueden alinearse detrás de él, quedarse callados, tratar de montar una tercera alternativa o derechamente una insurrección. Lo más probable es que salgan a decir que no van a apoyarlo, sin tratar de levantar otro candidato ni respaldar a Clinton”, señaló a PULSO el analista de Cato Institute, Juan Carlos Hidalgo.
Alfonso Aguilar, director ejecutivo de American Principles Project’s Latino Partnership, coincide, pero destaca que Trump “puede compensar la falta de apoyo de los líderes con el respaldo que consigue entre la clase trabajadora. Él rebaja las limitaciones partidistas, republicano- demócratas, y apela a la clase trabajadora independiente frustrada con la situación económica del país. La clase media está decreciendo, es muy difícil encontrar trabajos bien remunerados, la sensación de que