Salvaguardia al acero
El diario se reserva el derecho de seleccionar, extractar y titular los correos publicados. Como presidente de Asimet, es mi deber alertar que la reciente aplicación de una salvaguardia de 38,9% a las importaciones del alambrón de acero debe extenderse a toda la cadena de valor del insumo, a riesgo de que esta industria nacional quede fuera de competencia. Cabe recordar que, al fijar esta medida, la Comisión Antidistorsiones de Precios no la extendió a otros productos de acero que usan ese insumo como materia prima y que son importados, generando, según fuentes de esa industria, diferencias importantes de precios entre los clavos, mallas y alambres con origen foráneo y los que se elaboran en el país. Si bien es positiva la aplicación de esta clase de medidas en situaciones de competencia desleal o subsidios, en el caso de la sobretasa aplicada al alambrón de acero se corre el riego de que la industria nacional que manufactura productos a partir de esta materia prima quede fuera de mercado, con el consecuente desempleo que ello generaría. La competencia desleal que ha generado el exceso de producción de acero proveniente de Asia está siendo enfrentada por los países productores afectados con salvaguardias generales a la cadena de acero, y no solo a un producto en particular. Es un derecho que tenemos como país y el deber de nuestras autoridades es aplicarlo teniendo en cuenta a toda la industria afectada, ya que, de lo contrario, el remedio resultará peor que la enfermedad. Juan Carlos Martínez Z. Presidente Asimet
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