Claudio Martínez: “Las pymes tienen que perderle el miedo a subirse al carro electrónico”
EL 1 de agosto viene un gran cambio para las pymes en Chile, ya que tendrán la obligatoriedad de utilizar la factura electrónica (FE), abandonando el papel que fue el protagonista por décadas.
La industria del factoring es una de las más contentas con este cambio, ya que, según Claudio Martínez, presidente de la Asociación Chilena de Factoring (Achef), esto traerá un crecimiento del sector. “Permitirá una mayor agilidad en el curso de las operaciones de factoraje. Con la factura física, hay una serie de trámites bastante engorrosos, sobre todo para las pymes de regiones. Con la factura electrónica, todos esos trámites se transforman en imágenes digitales, donde el empresario puede estar en su oficina y cursar las operaciones”, comenta el dirigente de este gremio.
El próximo 8 de junio la Achef realizará una actividad donde dará a conocer cómo estuvo el cierre del 2015, con las cifras acumuladas, así como las proyecciones de este año. Al respecto, Martínez nos da algunos adelantos: “El año pasado no fue bueno para la industria, caímos un 8,6% nominal y 12% real. Pero a partir de noviembre hubo un cambio de tendencia al alza, que se mantuvo a marzo de este año. En abril se produjo una pequeña caída, pero este año en general nos ha ido mejor. Tenemos un crecimiento de 3,5% nominal a abril de 2016 (acumulado), con una caída en las ventas de 1,9%”en dicho mes, dice. —Cerca de un 5% nominal, que aún es bastante bajo si consideramos el crecimiento del 2010 al 2014 que llegaba a tasas cercanas al 20%. Pero aparte de la venta, nosotros medimos las diferencias que hay con la macroeconomía y si bien el factoring no es un producto aún maduro, estamos cada vez más correlacionados con el Imacec. Antes éramos un 5% del PIB, ahora llegamos al 9%. Los países desarrollados están cerca de 15%. Estamos mucho más indexados a la economía, por lo que si ésta crece al 3%, nosotros “apalancamos”. Si cae, no tendremos grandes crecimiento. Por eso que estamos muy esperanzados con la factura electrónica ( FE) como motor de un segundo empuje de la industria de factoring.
Entonces ¿Cómo estará el crecimiento económico para este año?
—La economía crecerá de 1,5%. Y los sectores nuestros que están incorporados a la economía, están asociados principalmente a la demanda interna. Al ver nuestras cifras, tenemos que los sectores de mayor crecimiento son el comercio (23%), la industria (20%) y construcción (18%). Como las empresas de factoring estamos en el flujo real al comprar ventas (facturas), o sea, donde la transacción realmente se realizó, tenemos la información el día 10 del mes siguiente, por lo tanto ya sabemos cómo le fue al mes anterior. De hecho, estamos lanzando un indicador que se compone de la venta de las empresas de la Achef con la de la Bolsa de Productos para decirle a los distintos gremios cómo es- tuvo a la actividad económica del mes y el acumulado.
El año pasado le fue bien al sector construcción…
—Sí, debido a que se adelantaron muchos proyectos producto de la Reforma Tributaria. Aún quedan efectos positivos en este año, pero ya se ve una desaceleración importante del sector inmobiliario.
¿Y cómo ha afectado la RT en el factoring?
—Creo que han sido sólo ventajas para nuestro sector, porque beneficia mucho a la pyme. La verdad que los cuestionamientos a la RT se han dado más en los aspectos macroeconómicos.
Acuso de recibo
Dentro de la Agenda de Productividad se incorporó una medida con respecto al factoring (modificación de la Ley 19.983). ¿Cómo beneficia esto al sector?
—Exacto, tiene que ver con el “acuso de recibo” de las mercaderías, que dice que éste puede ser entre 8 a 30 días. En el mundo físico, el acuso de recibo estaba incorporado en la misma factura de papel con la guía de despacho. En el mundo electrónico, en cambio, la legislación decía que el acuso de recibo debía ser electrónico, pero en la práctica, esto no se daba. Hoy, con la modificación, el deudor tiene como máximo 8 días para el acuso de recibo, si no se realiza, simplemente la factura se entiende por recibida.
¿Qué significa esto en términos jurídicos?
—Que la factura, al tener ese acuso de recibo aunque el deudor lo haya enviado o no, conceptualmente “tiene mérito”. O sea, que tienes un cobro ejecutivo de la factura y que el deudor en forma implícita está dando el OK a la recepción. Somos uno de los pocos países que fortalece más aún el factoring con esto. Pasar del mundo físico al electrónico ya fue bueno; pero esto es algo aún mejor. Se fortalece también la Bolsa de Productos, porque ésta necesita facturas para poder transar. Por lo cual, como asociación, creemos que ambas cosas harán que los actores bancarios y privados tengan una herramienta jurídica más para preferir el factoring como alternativa de financiamiento de corto plazo en beneficio de las pymes.
BENEFICIO A LAS PYMES “Tendrán más tiempo para gestionar y no gastarán tanto en trámites de facturación.”
PROYECCIONES ECONÓMICAS “Si bien el factoring no es un producto aún maduro, está cada vez más correlacionado con el Imacec”
SITUACIÓN DEL 2016 “Tenemos un crecimiento de 3,5% nominal a abril de 2016, con una caída en las ventas de 1,9%”
¿Ven a las pymes preparadas
— Cada actor de la asociación, con sus clientes, hacen actividades individuales y además, nosotros como Achef también las hacemos, principalmente en regiones, donde hay un amplio universo de pymes con realidades muy dispares. Por ejemplo, vamos con nuestros partners de la industria del leasing , y les explicamos las bondades de ambos productos, especialmente sobre las del mundo electrónico. Las pymes tienen que perderle el miedo a subirse al carro electrónico. Tendrán más tiempo para gestionar y no gastarán tanto en trámites de facturación.
La obligatoriedad parte justo en un año económicamente más complicado.
— Sí, por eso que los grandes beneficios de la masiva incorporación al negocio del factoraje los vamos a ver en un año con indicadores económicos mejores, pero no este año. Claramente el 2016 vamos a crecer más que los créditos comerciales y recuperar clientes que perdimos el año pasado, pero no creceremos tanto. Pero los que no tiene más contento es que seguimos perfeccionado la ley y esto hace que el riesgo crédito sea más bajo. Si tienes reglas del juego claras, más actores se incorporan. Por otro lado, por parte de los pagadores, existe más conciencia del facturan como alternativa de liquidez para las pymes, que al final, son sus proveedores, por lo que tienen que darle las facilidades de pago. Así, el riesgo operacional baja, lo que significa mejores alternativa de precios para las pymes.