Escasez de talentos, principal barrera en el sector agrícola
La empresa estadounidense Kincannon & Reed, headhunter dedicada al sector agroalimentario, llegó a Chile en búsqueda de nuevos talentos que cuenten con habilidades técnicas de especialización, carencia de los profesionales.
Si bien durante el año 2015 el sector silvo- agropecuario chileno alcanzó un crecimiento de 5,6% y fue el segundo sector del país -después de las telecomunicaciones que logró un 7,8%que más creció en relación al PIB - duplicándolo- aún hay problemáticas por resolver que plantean nuevos desafíos para seguir caminando en esa dirección.
Aunque el sector esté experimentando un crecimiento acelerado, actualmente no hay suficientes profesionales capaces de afrontar los desafíos que esto propone, tanto en Chile como en el exterior.
“El crecimiento y la competencia global están generando una amplia escasez de talento en América latina. Además, la definición de talento y lo que se requiere para tener éxito están cambiando ante nuestros ojos”, asegura David Turner, managing partner de la multinacional headhunter agrícola Kincannon & Reed en América Latina.
Un crecimiento que además va acompañado de fuertes cambios en el mundo de la agricultura, marcado por una mayor demanda y escasez de agua.
Según datos de Rabobank, la de- manda global por commodities agrícolas está creciendo cada vez más debido al aumento en la población mundial, cuyas proyecciones para el 2050 es alcanzar los 9 mil millones de habitantes, con lo que la demanda de comida sería un 60% más alto que la actualidad.
“Para suplir esta necesidad de alimentación hay que hacer también todo un desarrollo de distintas profesiones, como robótica, telecomunicaciones y biotecnología. Hoy las disciplinas en el sector silvoagropecuario no sólo están relacionadas a la ingeniería Agronómica, sino que también a nuevos dilemas del mundo actual que están cuestionando la forma de hacer las cosas y que tienen que ver con cómo alimentar al mundo con menos recursos y ser más productivos con menos agua y superficie. Se van a necesitar ejecutivos que estén conectados y aún tenemos el desafío de encantar a las nuevas generaciones para hacer el desarrollo de talentos que necesita el sector”, recalca Juan Pablo Buc, fundador de Exactta Agroheadhunter.
Según los expertos, en Chile faltan profesionales que cuenten con las habilidades técnicas de especialización, un conocimiento alto de inglés y que estén dispuestos a viajar fuera del país para trabajar de manera de poder competir y alcanzar los nuevos desafíos que se vienen en el sector agroalimentario mundial.
“En general, a las personas no les gusta trabajar en el área agrícola, sino que prefieren irse a una empresa financiera o del retail en Santiago. Por lo mismo, cuesta encontrar profesionales que tengan las competencias técnicas, comerciales, administrativas y de gestión para poder realizar los cargos que se están buscando. Esta es una problemática que debemos revertir en un contexto de crecimiento”, enfatiza Buc.
La profesionalización con talento exterior en un mercado que está cada vez más globalizado debe ser hoy el pilar en cualquier empresa, concepto que ya está muy integrado en las grandes empresas que cuentan con un área de recursos humanos para detectar los mejores talentos, pero no así en las peque-
El crecimiento y la competencia global están generando una escasez de talento en el área agrícola.
ñas y medianas empresas.
“Las medianas empresas son bastante conservadoras y tradicionales. Muchos de sus procesos de contratación son muy informales, se basan en referencias y suelen contratar a parientes o conocidos. Ahora si ellos quieren lograr tomar los mercados que se están abriendo, tendrán que empezar a contratar a los mejores talentos y profesionales para sus empresas”, recalca Buc.
El desafío por profesionalizar el negocio es aún mayor para estos agricultores tradicionales, porque “una mediana o pequeña empresa es muy difícil que sea atractiva para una persona que estudió en una buena universidad Ingeniera Comercial, Civil o Agronomía y que tiene muchas oportunidades para poder desarrollar profesionalmente en empresas grandes. Yo veo muy difícil que esas pequeñas empresas sean atrayentes, porque es de difícil expansión al requerir mucho capital y la naturaleza de un agricultor tradicional es más bien muy conservadora: mantiene su negocio a un ritmo de crecimiento muy moderado y en general, su gestión es más bien operativa y no de desarrollo”, recalca Juan Sutil, empresario y presidente de Empresas Sutil.
Faltan profesionales especializados, con un conocimiento alto de inglés y dispuestos a desarrollarse en el exterior.
Medianas y pequeñas empresas deben profesionalizar sus procesos de contratación.