Congreso y Ejecutivo ingresarán proyecto para que comisión externa fije sueldos
Miembros de la directiva de la Cámara cuestionaron el proyecto presentado, entre otros, por los diputados Giorgio Jackson y Gabriel Boric, señalando que deja las remuneraciones “al arbitrio de una ley simple”. Se buscan nuevas fórmulas.
—En eldebate del proyecto de ley que busca bajar la dieta parlamentaria y que está patrocinado, entre otros, por los diputados Giorgio Jackson y Gabriel Boric, el secretario general y el vicepresidente de la Cámara, Miguel Landeros y Gabriel Silber, respectivamente, llegaron hasta la comisión de Constitución de la instancia.
El proyecto presentado por un grupo de diputados pretende bajar en un 50% la dieta parlamentaria y aprobar una reforma constitucional para separarlo de la remuneración de los ministros de Estado, de manera que pueda ser rebajado a través de una ley en el Congreso.
En este contexto, durante sus intervenciones, ambas autoridades cuestionaron la iniciativa, ya que según se- ñaló el diputado Silber (DC) “este proyecto, entendiendo el fin perseguido, al final del día (…) entrega (la dieta parlamentaria) simplemente al arbitrio de la ley”.
En la misma línea, Landeros manifestó que “volver a dejar en manos del legislador, me parece, y esta es una opinión muy personal, que es el camino inverso a lo que ha hecho la doctrina institucional y constitucional, de ir apartando la remuneración de los parlamentarios, de la decisión de los parlamentarios”.
Para ambos representantes de la directiva de la Cámara, el sueldo de los parlamentarios debe mantener el ca- Debate. Ayer el vicepresidente de la Cámara, Gabriel Silber (DC), y el secretario general, Miguel Landeros, expusieron en Constitución. rácter constitucional, de manera, plantearon, que en un futuro no pueda volver a ser subido de acuerdo a los intereses del Parlamento y la discusión se reabra.
COMISIÓN AUTÓNOMA. En este contexto, Silber y Landeros anunciaron el envío de un proyecto paralelo a la iniciativa en discusión y que presentarán en conjunto con el Ejecutivo.
La iniciativa se viene trabajando desde hace un tiempo entre las directivas del Congreso y un equipo del Ministerio de Hacienda y pretende crear una comisión externa y autónoma de los parlamentarios, que sea la encargada de fijar la dieta no sólo de los congresistas, sino también de todas las altas autoridades de Gobierno.
“Sentimos que esta discusión no sólo debe darse a propósito de los parlamentarios sino que en general de todas las altas remuneraciones del Estado. Y es condición a nuestro juicio que sea un organismo autónomo, distinto a nosotros, el que tome este tipo de decisiones”, explicó Silber.
Según comentaron en la Corporación, la idea es que esta comisión, junto con fijar la remuneración de las altas autoridades, se reúna una vez al año para discutir los reajustes, para los que podrá encargar estudios y análisis externos.
Aunque aún se encuentran afinando detalles, ya se ha conversado que una de las opciones es que la comisión esté compuesta por un ex contralor, un ex ministro de Hacienda y un ex presidente del Banco Central.
Los representantes de la Corporación se han estado reuniendo hace algunos meses, quincenalmente, con el Ejecutivo, y la idea es que el proyecto ingrese antes de la presentación de la ley de reajuste del sector público.
Durante el debate en la comisión de Constitución también estuvo presente el diputado Jackson. Para el ex líder estudiantil, actualmente, en la práctica, es una ley simple la que permite, con la aprobación del Congreso, el aumento del sueldo de los parlamentarios y acusó que la diferencia es que esto se hace hoy “de manera oculta”
“Si no queremos engañarnos (...) el monto preciso de nuestra remuneración está dado por las leyes simples que rigen el monto de los sueldos de los ministros de Estado y sus asignaciones. Por lo tanto es una ley simple por iniciativa exclusiva del presidente o presidenta de la república la que aprobada por ambas cámara se transforma en un aumento de nuestro sueldo”, explicó.
El parlamentario agregó que el interés del proyecto es que “no podamos aumentarnos el sueldo”. La rebaja de la dieta parlamentarias ha abierto un profundo debate transversal entre los diputados, y genera varios rechazos.