“No hay recursos. No discutamos en qué año se podrá llegar a la gratuidad”
¿Qué le parece la forma en que se establece el camino de financiamiento para la gratuidad universal de la educación superior? En esta reforma ¿también primó lo político sobre lo técnico? ¿Y usted tiene dudas de su funcionalidad y de que cumpla los objetiv
—Para mí es muy nítido: no hay recursos. No discutamos en qué año se podrá llegar. No podemos comprometer gastos sobre la mesa sin poner primero la fuente de financiamiento, y en este caso no lo estoy viendo. Eso no es responsable. Como mecanismo fiscal, de seriedad, uno tiene que tener recursos y acá no veo el financiamiento. Lo que no están diciendo es que no hay financiamiento. Hace falta decir las cosas más claras y decir ‘no hay recursos’. —Se partió con diagnósticos malos o excesivamente políticos y por atender esos objetivos políticos se dejó de lado lo técnico. La tónica de este Gobierno ha sido ésa.
¿Es una mala reforma más allá de su costo?
—El sistema actual no es perfecto, hay cosas por hacer, pero no veo por qué pasar a un sistema donde le restamos espacio de gestión, de autonomía a las instituciones y dejamos en el Ministerio de Educación la definición de perfiles de carrera. Con esa política podemos retroceder y por lo demás no esta- mos enfocados en donde están los problemas reales, como por ejemplo avanzar en una mejor acreditación de las universidades y carreras, entre otros.
Fondo de infraestructura El martes pasado el Consejo Fiscal Asesor (CFA) entregó un informe sobre las implicancias que podría generar el Fondo de Infraestructura en la regla fiscal, ¿qué le pareció dicho informe?
—Es un informe técnico que dice que sería bueno que un organismo técnico internacional se pronuncie sobre los efectos en la regla fiscal, por lo tanto, tienen dudas. —No tengo ninguna seguridad más allá de que el proyecto dice que se manejará de manera rentable. —Hay que fortalecer mucho el control ya que las empresas no tienen buenos récords en inversiones. Y eso es con cargo a deuda. No sabemos si el subsidio saldrá del Gobierno o será con cargo a la rentabilidad de proyectos. Hay que mirar con cuidado el Fondo de Infraestructura. —Me gustaría tener un Consejo Fiscal Asesor (CFA) más empoderado, que no sólo sea un consejo asesor, sino que avance en otras materias y funciones, entre ellas, transparentar la regla fiscal, que tenga facultades para pedir información, tener respuestas y que pueda revisar las proyecciones fiscales de mediano plazo. Además, cuando los compromisos de gasto excedan a los ingresos, el Consejo podría contribuir a mejorar el instrumento, estandarizarlo e informarlo; generar espacios y metas de eficiencia del gasto público y proyecciones de largo plazo.