Abogados y tecnologías
HOY VEMOS cómo la tecnología irrumpe y transforma, revolucionando todo tipo de mercados. Impulsa a estrenar nuevos modelos de negocio, los que muchas veces aún no encuentran regulación. La tecnología está cambiando nuestro diario vivir y nosotros los abogados, siempre apegados a los usos y costumbres, no somos la excepción. Vemos que nos subimos al carro de la modernización o nos volvemos obsoletos. Por eso hoy los estudios adaptamos desde nuestro look & feel hasta la forma de comunicarnos con nuestros clientes; pero las cosas van más allá. Como decía un artículo que leí hace poco, si el cambio no es profundo, real, no sirven los retoques por fuera. Es así que términos como SAAS, DMS e IA deben dejar de ser desconocidos para los abogados. Hoy muchas de nuestras tareas se están realizando en base a plataformas de software DMS que permiten crear colaborativa y rápidamente la información legal, generando registros de los intervinientes de cada documento. Nos permiten buscar ágilmente la información, administrarla, compartirla y validarla; así, administramos mejor nuestros tiempos, disminuimos costos y simplificamos los procesos en departamentos legales de empresas y estudios. Asimismo, existen softwares que permiten que documentos legales básicos y estándares sean desarrollados automáticamente y se envíen a la autoridad correspondiente. Lo mismo ocurre con las respuestas automatizadas -al estilo SIRI- para consultas generales. En algunas prestigiosas oficinas de EEUU ya existen softwares capaces de usar Inteligencia Artificial para leer y entender cientos de documentos legales que agilizan los procesos de due diligence, permitiendo a un abogado realizar su trabajo en la mitad del tiempo; o los que convierten en un commodity la investigación jurídica, generando algoritmos capaces de entregar doctrina y jurisprudencia relacionada en segundos. Debemos entender que la intención de estas tecnologías no es reemplazarnos, sino ayudarnos a trabajar en forma más eficiente, de manera que podamos dedicarnos a agregar valor a nuestros clientes, distinguiéndonos por aspectos asociados a la estrategia, negociación y habilidades blandas. Estemos atentos al cambio y vayamos de la mano con los avances tecnológicos.