Los desafíos de la banca
En la discusión legislativa es vital que esta se mantenga en un ámbito técnico y se proteja el activo país que es la solidez bancaria.
tan más del 85% del PIB, beneficiando a más de 5 millones de familias y empresas. Asimismo, en su rol de intermediación la banca administra más de 20 millones de cuentas de ahorro y depósitos, lo que demuestra la confianza de los clientes en la industria.
Sin embargo, el dinamismo de la actividad bancaria se ha moderado, en línea con el prolongado escenario de menor actividad económica del país en general, luego de cumplirse tres años de crecimiento promedio del PIB de menos de 2%, y la perspectiva para 2017 no es más alentadora. Sin duda que este bajo crecimiento nuevamente será un importante reto para la industria, sobre todo si se considera que las tasas de interés de largo plazo a nivel internacional ya están al alza.
A lo anterior, se suma un período de cambios regulatorios de gran relevancia para el sector. En efecto, la banca debe enfrentar la modificación de su principal marco legal, la Ley General de Bancos, que implicará transitar hacia Basilea III y el denominado Capital Tier 2, la incorporación de la Superintendencia de Bancos a la Comisión de Mercado de Valores, además de iniciativas legislativas, como la modificación al Sernac. Ello constituye nuevamente un gran desafío para la industria, debido a que su discusión se llevará a cabo en un clima de creciente cuestionamiento a las instituciones y en un período que coincidirá con el ciclo político eleccionario.
Bajo este marco, la industria no debe descuidar su foco de esfuerzos por entregar cada vez más y mejores servicios a sus clientes, sobre todo con el gran desafío, que ya es una realidad, de transitar de una banca transaccional y masiva a una banca digital móvil. Ligado al desarrollo de nuevos servicios financieros y medios de pago, además del creciente acceso que exigen los clientes a los proveedores de servicios, el tema de la seguridad pasa a ser un elemento clave, la cual no sólo implica derechos a los clientes sino que también obligaciones. enmarca en el gran reto por seguir mejorando aún más la experiencia de los clientes con la banca, superando el esfuerzo ya realizado y que sitúa a la industria bancaria como el sector líder, junto a otras dos industrias de un total de 26 evaluadas, en la publicación reciente del índice de experiencia de servicio de la consultora Praxis Customer Engagement, que busca medir tres dimensiones de la interacción con el cliente: efectividad, facilidad y agrado.
En materia de discusión legislativa, es vital que la misma se mantenga en un estricto ámbito técnico, ya que es la única manera de que se proteja el activo país que representa la solidez de la industria bancaria. Ello es fundamental para que tengamos una banca que no sólo acompañe al crecimiento del país, sino que también continúe siendo un apoyo al esfuerzo individual que realizan las personas por tener una mejor calidad de vida.
En síntesis, 2017 será un año de grandes desafíos para la industria y la banca siempre estará disponible para ser un actor de relevancia en la construcción de una recuperación de la confianza en nuestro país.