Aswath Damodaran y rally de Wall Street: “El mercado no está considerando que habrá perdedores con la reforma tributaria”
ENTREVISTA AL EXPERTO EN VALORIZACIÓN Y FINANZAS CORPORATIVAS DE LA STERN SCHOOL OF BUSINESS NYU
— Asegura que las empresas que históricamente han pagado bajos impuestos podrían ver un alza en su tasa. — Anticipa efectos en el tipo de cambio global y consecuencias en las ventajas competitivas de las firmas.
EN UNA gira regional que lo traerá por Brasil, Perú, Colombia y Chile, Aswath Damodaran, profesor de valorización y finanzas corporativas de la escuela de negocios Stern de la New York University, visitará nuestro país el próximo 18 de octubre para participar del Santiago Finance Seminar 2017. Damodaran compartió su visión sobre la próxima reforma tributaria de Estados Unidos, que, asegura, marcará la pauta este año.
Después de la elección de Trump vimos un rally, ¿qué puede ocurrir ahora?
— Habrá una pausa y la gente va a esperar a ver qué ocurrirá, ya que la mayor parte del alza en los precios de las acciones se debe a la expectativa en torno a la reforma tributaria de Estados Unidos. Es una de las pocas cosas en las que los dos partidos están de acuerdo, en que el código tributario es completamente deficiente. Creo que veremos que las tasas de impuestos bajarán en Estados Unidos y también veremos cambios en cómo se trata actualmente a la deuda. También habrá diferencias en cómo se gravan algunas cosas, ya sea que se fabriquen en Estados Unidos o vengan de afuera. Será un cambio significativo y en el agregado algunas empresas estadounidenses estarán mejor con una mejor ley tributaria. Esa es la expectativa que estamos viendo, no es lo de la infraestructura ni las demás cosas que la gente vincula con Donald Trump, sino que tendremos una nueva ley.
¿Cuándo puede llegar?
—Depende del congreso, y nada pasa en un par de meses en el congreso. Van a empezar a discutirlo y van a avanzar y retroceder. Será como mirar cómo se prepara una vienesa. No será bonito. Habrá lobby y lo querrán reescribir. Tomará un tiempo y el proceso tomará gran parte de este año. Pero será un gran cambio. No serán simplemente las modificaciones que hemos visto durante los últimos años, sino que se va a tratar de algo más sustancial.
¿Cómo se están preparando los mercados?
— Los precios de las acciones están al alza y deben estar considerando que entre 30% y 40% de las empresas estadounidenses se van a beneficiar del cambio tributario, sobre todo las firmas que pagan tasas más altas de 33%, 35% y hasta 37%, ya que verán una caída en los impuestos que pagan. Sin embargo, lo que posiblemente no están considerando es que es un juego de suma cero y que no puedes recortar impuestos de algunas empresas y esperar recaudar la misma cantidad de dinero sin tener a otras empresas que paguen más impuestos. El mercado no está considerando que habrá perdedores con la nueva reforma tributaria y serán las empresas que históricamente han pagado bajos impuestos y que han usado la ley a su favor. El mercado está contando a los ganadores, pero no refleja adecuadamente a los potenciales perdedores.
¿Quiénes serán?
— Hay una forma simple de averiguarlo. Busca empresas que pagan una baja tasa efectiva de impuestos. Un 25% de las empresas estadounidenses pagan menos de 20% de tasa efectiva de impuestos y eso es porque utilizan componentes del código tributario que les permiten no pagar impuestos. Mi apuesta es que a cambio de rebajar la tasa de impuestos para las empresas, muchos de esos componentes que se sumaron al código tributario y permitieron que empresas pagaran menos, van a desaparecer. Entonces, si tuviera que hacer una lista de empresas partiría con esas, las que pagan la menor tasa efectiva de impuestos como 3%,5%, 7%. Y hay grandes empresas, como las petroleras o de commodities, que históricamente se han beneficiado del código tributario y podrían ver de repente un salto en lo que pagan cuando llegue la reforma.
Entonces el resultado será un código tributario más equilibrado... ¿qué le parece?
— En general, esto es bueno para la economía de Estados Unidos. El código tributario en este momento es como un árbol de navidad, lleno de adornos que se han ido sumando con el tiempo. Es un árbol de navidad muy viejo, que tiene ornamentos muy pesados que tiran para abajo. Es hora de que el código vuelva a ser escrito. Mi punto es que cuando lo hagan, no todos serán ganadores, sin mencionar a todo el ecosistema que se ha creado en torno al código tributario, incluyendo precios de transferencia, abogados tributarios y contadores tributarios que puede que tengan que buscar un nuevo empleo. Es algo que podemos esperar si la reforma se traduce en un código más simple y más limpio.
REFORMA EN EEUU “No será bonito. Habrá lobby y la querrán reescribir. Tomará un tiempo y el proceso demorará gran parte de este año”.
FIRMAS QUE VERÍAN ALZAS “Las petroleras o de commodities, que históricamente se han beneficiado del código tributario”.
CÓDIGO TRIBUTARIO DE EEUU “Es imposible tener un código tributario ideal cuando tienes una economía tan compleja como la de EEUU”.
INCERTIDUMBRE EN 2017 “Este será un año interesante con los votos en Francia y Alemania.”
¿Así es el código tributario ideal, que sea más simple?
— Es imposible tener un código tributario ideal cuando tienes una economía tan compleja como la de Estados Unidos. Pero si se hace más simple no tendrás este ecosistema de gente intentando ganar el juego tributario. No quieres que las empresas hagan inversiones por tu código tributario, sino que quieres que las empresas hagan inversiones porque tienes un buen producto o servicio o porque los clientes necesitan ese producto o servicio, algo fundamental. Eso permite un código tributario más simple, que las empresas se enfoquen en sus negocios y no en cómo tomar ventajas tributarias.
¿Qué efecto tendrá en el resto del mundo?
— Veremos efectos en el tipo de cambio, pero también en ventajas competitivas. Cuando piensas en las empresas estadounidenses muchas son empresas globales, que compiten a nivel global y durante los últimos 20 años les hemos dado una ventaja a empresas establecidas afuera de Estados Unidos por cómo está escrito nuestro código tributario. Entonces, ahora las firmas de Estados Unidos podrían
más competitivas, lo que se revelaría en el tipo de cambio y en el mercado de productos. Podría afectar a una empresa chilena de commodities que compite globalmente contra otra estadounidense de commoditties que pudo haber estado perjudicada por los impuestos, entonces es mejor para la competencia en todos los negocios. Cambiarán las reglas del juego para empresas de Estados Unidos y del mundo.
¿Cree que los actores del mercado aprendieron a lidiar con la incertidumbre, después de un 2016 en que vimos la votación del Brexit y la elección de Trump?
— No aprendimos a lidiar con la incertidumbre, sino que tenemos un tipo distinto de incertidumbre, relacionada a que nos dimos cuenta de que la globalización va en una sola dirección y siempre estaremos más globalizados, no obstante, como todo suceso que le ocurre al ser humano, avanzamos tres pasos y retrocedemos dos y puede ser que estemos en ese retroceso y podría durar varios años. Entonces, puede que veamos menos globalización en el corto plazo, lo que afectará a las empresas que dependen de ella para su éxito. Este será un año interesante con los votos en Francia y Alemania.
Como inversionista, ¿cuál es su recomendación para tomar una decisión de compra de acciones de una empresa?
— El punto no es si uno compra una empresa buena o mala, sino si acaso la estamos comprando al precio correcto. Si tengo una buena empresa que tiene el precio de una gran empresa, será una mala inversión, porque el mercado le ha puesto un precio que será mejor de lo que puede ser. Uno gana dinero en el mercado basado en cuales son las expectativas del mercado de lo que una empresa puede hacer realmente. Por ejemplo, Amazon es una gran empresa, pero como inversión su precio es muy alto. O Deutsche Bank puede ser que no me guste, porque está mal manejado, pero en octubre de 2016 la compré porque el precio cayó tan bajo que era una buena inversión. Cuando se hace una inversión hay que pensar no solamente en si acaso la empresa es buena o mala, sino en el precio al que la estoy obteniendo. Una buena analogía podría ser una casa en Santiago que esté a la venta. Si es una casa grande y su precio triplica lo que otra gente está pagando por casa similares, no la comprarías. Pero si hay una casa promedio que se está vendiendo a la mitad de lo que la gente está vendiendo casa similares, aunque sea una casa promedio es una inversión, porque la estás comprando al precio correcto.
¿La clave es comprar barato?
— Hay que buscar disparidades. Buscar empresas que el mercado no entienda. Son buenas empresas que el mercado les pone un precio como si fueran malas. Esa es una buena inversión, ya que se trata de una disparidad. Hay que buscarlas, de eso se tratan las inversiones. Cada estrategia de inversión es un intento de encontrar una disparidad.P