Reformas con calle para pymes y emprendedores
SABEMOS QUE en la medida que las empresas se desarrollan y crecen van alcanzando mayores niveles de productividad, ya sea por las economías de escala que generan, o bien porque el tamaño permite la especialización. Lo peor que le puede pasar a nuestra economía es que sea la regulación la que desincentive su crecimiento, y en especial de las empresas pequeñas y medianas que tiene importantes brechas de productividad. Esto es justamente lo que en el diseño de las reformas tributaria y laboral no se ponderó adecuadamente.
¿En qué emprendimiento se habrán basado para diseñar una Reforma Laboral que fuerza a las pymes a formar sindicatos y definir sus servicios mínimos en caso de huelga? ¿De qué nos sirve tener uno de los mejores ecosistemas de emprendimiento de la región si a los emprendedores post Reforma Tributaria les ponemos incentivos para que anden por esta esta carretera de clase mundial a 60 km versus los 120 km por hora permitidos? Son justamente los cambios discretos en la carga tributaria para los emprendedores y pymes comparados con las grandes empresas los que agregan lomos de toros en el camino.
La primera política pro emprendimiento que debe impulsar un próximo Gobierno es reformar ambas reformas. Salir a la calle, escuchar a las pymes, entender su problemática para luego diseñar los cambios que les suelten las amarras y les permitan cruzar sin calculadora a la máxima velocidad permitida, el camino que las separa de las grandes empresas. Perfeccionar la Reforma Laboral, para que su diseño refleje la realidad y naturaleza más flexible y diversa que representan, pero resguardando siempre los derechos de sus trabajadores. Simplificar y eliminar los desincentivos que genera la Reforma Tributaria en estas empresas. Si el rediseño se hace bien, tendremos dos reformas que aporten al crecimiento. ℗
El autor es ingeniero comercial, MBA Universidad de Chicago y ex gerente corporativo de Corfo (@acevedoinfante).