EDITORIAL: Un Banco Central más realista
Si bien para este año el tono es más pesimista respecto del crecimiento, no se debe perder de vista que en el año 2018 podría registrarse un repunte no menor.
EL BANCO CENTRAL publicó ayer el Informe de Política Monetaria (IPoM) correspondiente a marzo. No resulta fácil sacar una sola idea fuerza o conclusión de este informe, dado que, como siempre ocurre en economía, tiene varios matices y depende del foco que se le quiera dar, el número de miradas que se obtienen.
Lo concreto es que redujo su proyección de crecimiento para este año a un rango de entre 1%y 2%, un poco más pesimista respecto del consenso del mercado, aunque marginalmente. Incluso sorprendió a algunos bancos de inversión que todavía tienen una previsión sobre 2% para 2017. El informe se hace cargo de una desaceleración más pronunciada en los últimos meses de 2016 y los inicios del año actual. En el IPoM de diciembre pasado, el BC pronosticaba una expansión desde un 1,5% a un 2,5%. Aquí tiene un efecto el golpe que ha significado para la producción del país la paralización de la minera Escondida, que le resta, de acuerdo con sus cálculos, 0,2 pp al avance del PIB de 2017. Por su parte, el aumento esperado para la formación bruta de capital fijo es de 0,2%, bastante inferior al 0,7% que pronosticó la entidad en la versión pasada del IPoM. Un riesgo no menor es que dicha variable pueda encadenar cuatro años consecutivos de decrecimiento.
Este menor dinamismo se presenta pese a que se mejoró la perspectiva de los países socios comerciales (a 3,3% desde 3,2%).
Todo lo anterior es una realidad y parece un panorama bastante sombrío. No obstante, es pertinente elevar la mirada hacia fines de este año y a 2018, horizonte en el cual asoman números algo más auspiciosos. Después de un primer trimestre creciendo prácticamente cero, definitivamente este será (o debería serlo) el año en que la economía irá de menos a más. Por lo demás, todo apunta a que gracias al mejor ambiente externo y una política monetaria expansiva, entre otros factores, el próximo año la actividad doméstica se expandirá en el rango entre 2,25%3,25%. Más allá de la actividad, el Banco Central también dio a entender que habrá una rebaja más de la tasa de política monetaria y que el tipo de cambio está en valores razonables.
Otro factor que destacó el BC en el informe y que permite mirar con un mayor optimismo lo que viene, es que las expectativas de los empresarios -IMCE sin minería-, si bien continúan pesimistas, en particular las del sector construcción, están mostrando “cierta recuperación” frente al último mes del año pasado, lo que a juicio de la entidad ha sido más notorio en la industria. En definitiva, fue un IPoM realista, que se pone al día con la visión del mercado y que entrega más luces a los tomadores de decisiones respecto de qué esperar de sus futuros movimientos. ℗
El factor externo y una leve mejora en la confianza empresarial, son elementos que permiten pensar en un mejor año 2018.