BBVA recorta estimaciones y prevé enfriamiento económico en América Latina
Según la entidad que corrigió sus previsiones a la baja, la región crecerá 0,8% en 2017, mientras que para el próximo año estima un PIB de 1,7%, en línea con una fase de tensa calma.
— “La economía de América Latina se enfrentará a un crecimiento lento en 2017 y 2018”. Esa es la descripción que realizó un nuevo estudio de BBVA Research sobre un panorama poco alentador para la región, pese a una recuperación frente a los niveles obtenidos después de la contracción en 2015 y 2016.
En el informe, la institución corrigió sus previsiones a la baja sobre el PIB de América Latina, a 0,8% este año y 1,7% el próximo, en línea con un proceso de enfriamiento.
Así, la compensación que sentirá Latinoamérica en sus cifras durante este período, se debe principalmente a la salida de la recesión de dos de los países más grandes del grupo como Brasil y Argentina, alentando las cifras, pero todavía bajo el potencial del continente y de las economías desarrolladas.
“Cuando uno mira al resto de los países de América Latina lo que uno ve en realidad es una desaceleración en 2017 con respecto al 2016”, dijo el economista jefe para América del Sur de BBVA Reasearch, Juan Manuel Ruiz, y agregó que todavía es un crecimiento que califican como lento en relación al potencial de 3% y a la brecha de renta per cápita respecto a los desarrollados, aunque “estamos en la dirección correcta”, acentuó el experto.
LOS COMPONENTES. Dos son los factores que acompañarán el desempeño de la región en el corto plazo. El primero corresponde al sector externo, donde primará una mejora en los términos de intercambio que anticipa el estudio para la región, sumado
al efecto rezagado de las fuertes depreciaciones de los tipos de cambio sobre el sector exportador.
Desde el entorno externo se prevé un aumento del crecimiento mundial que se traducirá en un apoyo a la demanda.
El otro driver del crecimiento concentrado en algunos países será el despegue de la inversión. “Lo estamos viendo en Argentina y ese será un impulso muy importante en el crecimiento de ese país, pero también lo será sobre todo en el año 2018 en el caso de Colombia y en el caso de Perú”.
“Se producirá un crecimiento heterogéneo en la región donde destacan las tasas de crecimiento de Argentina, Perú, Uruguay y Paraguay como las mayores entre los países para 2017 y 2018”.
Entre las variables de interés, la inflación ha continuado con su senda descendiente en los países de América del Sur, gracias a una relativa apreciación del tipo de cambio que ha favorecido que los bienes mantengan una estabilidad en los precios. La propia debilidad de la demanda interna en algunos países también ha lastrado a los precios.
“Es un proceso que vemos que va a continuar en algunos países, incluso llevando a que la inflación caiga por debajo del rango objetivo del Banco Central como en el caso de Chile, pero hacia adelante vemos una convergencia”, señaló Ruiz, asegurando que una historia diferente vivirá México, que como consecuencia de la fuerte apreciación del peso ha vivido un aumento de la inflación desde noviembre de 2016. “Las buenas noticias son que creemos que el máximo se alcanzó en junio y hacia adelante debiéramos ver una corrección”.
Lo anterior, permitirá a las entidades monetarias continuar con el proceso de recortes de tasas de interés y que la política monetaria siga siendo un apoyo para recuperar el dinamismo de la demanda interna.P
“Vemos un crecimiento internacional que continúa siendo robusto a tasas del 1% trimestral”
“Los riesgos se han reducido en EEUU y han aumentado en el medio y largo plazo en el lado de China, siendo favorable para la región”
“La política monetaria seguirá llevando todo el peso del ajuste contracíclico en la región, por falta de impulso fiscal” JUAN MANUEL RUIZ Economista Jefe para América del Sur de BBVA Research