“El señor Cueto no tiene perfecto conocimiento de la normativa que aplica a los contratos de concesión en Chile”.
Por su parte, la concesionaria Nueva Pudahuel salió también al paso de las críticas. Señalaron que al final del día ofrecerán un terminal que será referente regional.
—El gobierno salió al paso de las fuertes críticas que realizó el presidente de LATAM Airlines, Ignacio Cueto, que cuestionó el actual sistema de concesiones, a su juicio anacrónico, por falta de salidas a los contratos, y las elevadas tasas aeronáuticas que se cobran. En concreto, cuestionó que los impuestos recaudados por el fisco por concepto de tasas, no se utilizaran para infraestructura de aviación, calificando al principal aeropuerto del país de “caro y malo”.
Eduardo Abedrapo, coordinador de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas, fue el encargado de responder por parte del Ejecutivo. Y habló fuerte y claro. “El señor Cueto está tratando de resguardar los intereses de la línea aérea que preside”. Y agregó: “Nosotros no podemos mirar ese tema de concesiones, y particularmente el aeropuerto, desde la mirada sólo de las aerolíneas, sino que tenemos que mirarla des- de el punto de vista de los intereses públicos que hay detrás, y particularmente de los usuarios del aeropuerto, que son tanto los pasajeros como las empresas que operan en él. Hay que entender que el sistema aeroportuario nacional es una red, no es sólo el aeropuerto AMB, y por tanto, como bien sabe el señor Cueto, Chile cumple con altos estándares de seguridad en materia de vuelo y control aéreo, y eso tiene un costo”.
Respecto a las críticas del presidente de LATAM en relación “al impuesto directo a la aviación”, Abedrapo fue tajante: “No se trata de impuestos, se trata de tasas de embarque más otros derechos aeroportuarios, que tienen su sentido en poder asegurar el financiamiento de la DGAC, y esto quiere decir de todo el equipo profesional y técnico, además de todo el equipo tecnológico que requiere para poder cumplir adecuadamente sus funciones en todo el país, no sólo en el aeropuerto Arturo Merino Benítez”.
Asimismo, el Gobierno se defendió de las críticas al modelo de concesiones. Abedrapo explicó que la ley de concesiones se modificó de forma bastante sustantiva en 2010, con la posibilidad incluso de ajustar los contratos en caso que las concesiones, no den cuenta de los requerimientos actuales. “El señor Cueto no tiene perfecto conocimiento de la normativa que aplica a los contratos de concesión en Chile. El mismo contrato de concesión establece mecanismos por si se requieren a futuro inversiones para dar cuenta de los crecimientos de demanda”, señaló. “Y finalmente, si incluso en algún momento se revelara que es necesario poder acelerar el mismo contrato, la ley chilena así lo permite”, agregó. “Hay una mala lectura tanto del contrato como de la normativa aplicable”, insistió.
La concesionaria del aeropuerto, Nueva Pudahuel, también salió al paso de la polémica. “Si bien es cierto que las obras actuales modifican las instalaciones, es un proceso indispensable a través del cual el aeropuerto de Santiago se prepara para recibir más pasajeros, y a ofrecer el esquema indispensable para el crecimiento de todos los actores actuales, tanto los históricos como los nuevos”, señaló el gerente general, Nicolas Claude. Subrayó que: “Todo esto , con el objetivo de incrementar la conectividad de Santiago y del país. En breve, el MOP y nosotros ofreceremos un terminal, que será un referente regional en cuanto a diseño, espacio para las aerolíneas y comodidad para los pasajeros. Durante este corto tiempo de construcción, toda la comunidad aeroportuaria ha sido parte de estos cambios y todos trabajamos en pos de una meta en común. Estoy seguro que las aerolíneas lo saben”, indicó.
“El señor Cueto no tiene perfecto conocimiento de la normativa que aplica a los contratos de concesión en Chile”.
EDUARDO ABEDRAPO Coordinador de Concesiones del MOP