Un aliado ante los momentos críticos
DE ACUERDO con la ONU, a nivel global ocurren en promedio 335 desastres naturales asociados a factores climáticos por año. En la misma línea, el British Geological Survey (centro británico de geociencia), sostiene que en promedio ocurren 15 terremotos de gran magnitud en el mismo periodo.
Chile no es ajeno a esta realidad, y según un catastro realizado por el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), desde 1980 nuestro país sufre un promedio de dos catástrofes naturales por año. Es así como inundaciones, desbordes de río, aluviones, erupciones volcánicas y terremotos han sido presenciadas por la mayoría de los chilenos alguna vez en su vida. Además, estimaciones de la ONU indican que durante el 2015, el nuestro fue uno de los países que más pérdidas económicas sufrió por este tipo de eventos, superando los US$ 3.100 millones.
Estas catástrofes han impulsado un fuerte desarrollo tecnológico para alertarnos, prevenirnos o dar mejor respuesta tras su ocurrencia. Es así como podemos encontrar diversas soluciones que nos advierten acerca de la proximidad de avalanchas, incendios forestales, erupciones volcánicas, huracanes e incluso tsunamis, otorgándonos la posibilidad de recibir una alerta segundos o minutos antes de la ocurrencia del evento.
Por lo mismo, el ecosistema que da vida a este tipo de soluciones continúa en expansión y se ha caracterizado por el crecimiento explosivo de tecnologías como IoT, Big Data o Analytics, encargadas de dar vida a este tipo de herramientas. Así también lo evidencian proyecciones formuladas por IDC, quienes indicaron que durante 2017 nuestro país crecerá en Internet de las Cosas un 25%. Es decir, 10 puntos más que lo proyectado para Latinoamérica. En la misma línea, se estima que la inversión en Big Data y Analytics aumentará en 18%, alcanzando los US$ 500 millones a fines de este año.
Según nuestra experiencia como proveedores de Servicios Digitales, algunas de las herramientas que indiscutiblemente apoyan a las empresas en estas circunstancias son el cloud computing y los datacenter. Ambas permiten albergar y poner a disposición la información sensible de las empresas y, para ello, se construyen edificios totalmente seguros, con modernos aisladores sísmicos, sistemas de prevención de incendios y protocolos de seguridad que tienen como única misión asegurar los datos de las organizaciones que son clientes y pagan por ese backup.
Afortunadamente, en nuestro país el mercado de centros de datos es cada vez más competitivo. Además, han obtenido un buen desempeño, permitiendo atraer y captar un creciente número de clientes relevantes en el mercado, confiando en estas tecnologías para soportar -por ejemplolas transacciones bancarias de todos los habitantes del país o incluso el despacho de los llamados de emergencia, como el 133 de Carabineros de Chile.
Por eso, nuestro desafío como proveedor de servicios digitales será continuar invirtiendo en tecnología, servicios, innovación y certificaciones, además de alcanzar una mayor capacidad de procesamiento en menor espacio físico, mejorando la eficiencia energética y asegurando que la información esté siempre disponible, especialmente durante una emergencia, que es cuando más se necesita. Para ello, la mejor forma será trabajar con un proveedor de presencia regional, capaz de brindar respaldo no sólo en nuestro país.
En 2017, Chile crecerá en un 25% en IoT. Es decir, 10 puntos más que lo proyectado para Latinoamérica.
Afortunadamente, en nuestro país el mercado de centros de datos es cada vez más competitivo.