Nivel del debate
Las ideas y propuestas de los candidatos presidenciales han quedado en un segundo plano. Ha primado un bajo nivel de discusión, salvo en Enade, donde sí se pudo hablar del futuro.
HASTA EN el período de campaña electoral todo vale, se suele decir. Y esto parece estar sucediendo durante el camino a La Moneda en su versión 2017. La serie de debates en que han participado los candidatos presidenciales, o la mayoría de ellos, sin duda ha dejado un sabor amargo. Uno de los más nefastos hechos en estos encuentros fueron las monedas lanzadas por un candidato a otro. Sin duda, un nivel muy bajo.
La mirada sobre qué país quieren alcanzar, conversar acerca de qué diferencias existen entre las distintas ofertas de los candidatos de centro e izquierda, así como también en la otra vereda política, habían quedado, al menos, en un segundo plano. De temas del futuro, como los desafíos del mercado laboral con la llegada y aplicación de las nuevas tecnologías, tampoco se ha hablado. Afortunadamente, algo de esto último se pudo constatar en el último Encuentro Anual de la Empresa (Enade), organizado por Icare. En particular, la presentación de Alfredo Moreno, presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), en la que propuso enfocarse en el mañana y así enfrentar el avance tecnológico que, para muchos negocios, es una amenaza, pero si nos preparamos, será una oportunidad. La exposición de cada uno de los candidatos invitados a participar (no fueron todos), también se enfocó en ese espíritu. Propuestas, ideas y un mensaje más claro acerca lo que quieren para el país se pudo percibir en Enade.
La mirada autoflagelante de lo que hizo la Concertación o incluso la administración de Sebastián Piñera, no formaron parte de sus exposiciones. Es de esperar que este nivel de debates e ideas sea el que prime en las pocas semanas que quedan para el 19 de noviembre.