Las malas ideas no duran mucho,
EL GRAN temor y la incertidumbre de la mayoría de los empresarios, tanto pymes como grandes, es que Chile perdió su centro político y que aunque Sebastián Piñera gane, el país no recuperará su crecimiento histórico del 5%, y que más bien este se situará en promedio en torno a 2,5% para 2018 y 3,5% para 2019, lo que no ayuda a nuevas inversiones, y más aún a recuperar el dinamismo perdido ni la confianza en el mediano plazo. El Gobierno de Piñera será de “contención de daños”; de hecho, el aumento de costos en las empresas listadas en el IPSA ha provocado una caída de 13,2% de las utilidades, dato que hace visibles y plasmables las reformas elaboradas equivocadamente por este Gobierno. En los próximos cuatro años no veremos crecimiento relevante que incentive inversión, así como tampoco tendremos grandes desequilibrios en la economía doméstica, pero sin grandes proyecciones; dicho de otra manera, tendremos un país plano, flat.
Esa misma visión, en mi opinión, comparte la banca y se explica por los cambios en el mercado con la fusión del banco Itaú con CorpBanca y la potencial compra del BBVA por parte de Scotiabank. Se trata de señales potentes que reflejan que el mercado del crédito se ajustó y que el nivel de competencia entre los bancos será durísimo, donde la concentración bancaria será un factor determinante en empresas medianas y pequeñas, ya que con menos bancos habrá menos oferta de crédito y las tasas tenderán al alza. Con estos recientes eventos, tendremos dos categorías de bancos, los grandes y los pequeños, mientras la categoría de los medianos desaparece. Nuestro país cambió radicalmente estos cuatro años, no sólo en lo político, sino también en lo económico y en lo que respecta a la banca. Es así como a pesar de un potencial triunfo de Piñera, Chile mantendrá un bajo rendimiento respecto de su historia de crecimiento. Como me decía un empresario, “¿qué gano con invertir con Piñera si en cuatro años más vendrá una nueva retroexcavadora?”. En la vida no existen atajos para los lugares que valen la pena.