Venezuela, la crisis del país más rico de América Latina
Editoriales El deterioro coincide con la Revolución Bolivariana de los regímenes de Chávez y Maduro, que se ha traducido en una crisis económica, social y fiscal, dejando al país al borde de un impago total.
SEGÚN
datos del FMI, en 1980 el PIB per cápita (PPP) de Venezuela más que duplicaba el de Chile (US$8.000 frente a los US$3.500 de nuestro país), una brecha que se fue estrechando con los años, superando Chile a Venezuela ya en 2002. Hoy la diferencia en favor de nuestro país es de US$24.587 frente a los US$12.388 de Venezuela, este último un registro que Chile ostentaba hace 17 años. La hoy distante bonanza previa de Venezuela recogía el ciclo del precio del crudo por las crisis internacionales de 2003, 2004 y 2008, que llevaron al país a acumular reservas internacionales por US$43.127 millones.
El deterioro y la actual caída de Venezuela coinciden con la Revolución Bolivariana de los regímenes de Chávez y Maduro, la que no sólo se ha traducido en una crisis económica, sino también social y fiscal, y que hoy tiene al país al borde de un impago total.
Sólo en esta semana, dos agencias clasificadoras han declarado al país “en default parcial o restringido”, producto de la incertidumbre generada por los retrasos de pagos que vencían en las últimas semanas, y las proyecciones tampoco son auspiciosas: Venezuela tiene por delante pagos por US$1.470 millones hasta fin de este año, y por US$8.000 millones en 2018, pero sus reservas internacionales ascienden apenas a US$9.700 millones. Sumado a lo anterior, las sanciones impuestas por Estados Unidos sobre el país y altos funcionarios del Gobierno aumentan las presiones y dificultan el camino de negociación con los tenedores de los bonos de Caracas.
La paradoja es que, pese a poseer las reservas de crudo más importantes del mundo, la realidad de Venezuela es insostenible y el daño hecho a sus variables macro parece difícil de revertir mientras -existe una coincidencia al respecto- persista el actual régimen político y la crisis social que enfrenta el país no se resuelva.