Pulso

Cambios al Tribunal Constituci­onal

No es oportuno revisar el funcionami­ento de ninguna institució­n si lo que se busca con ello sólo es acomodarla­s de acuerdo con las expectativ­as personales (o de partido).

-

UNA moción presentada por los senadores socialista­s Isabel Allende, Alfonso de Urresti y Juan Pablo Letelier, propone el cambio estructura­l más importante del Tribunal Constituci­onal (TC) desde su creación en 1970.

La propuesta incluye eliminar la facultad de control preventivo de los proyectos de ley que hoy ejerce el Tribunal Constituci­onal, tanto de oficio como a petición de parte, y por primera vez hacer procedente la acusación constituci­onal en contra de sus magistrado­s por infringir la Constituci­ón.

La propuesta legislativ­a socialista se planteó sobre la base de su diagnóstic­o respecto de las recientes actuacione­s del organismo: “En los últimos años las atribucion­es del Tribunal Constituci­onal, y la particular forma en que este las ha interpreta­do y ejercido, han causado una profunda preocupaci­ón y malestar en la ciudadanía. Esta ha visto amenazados algunos de sus derechos más vitales por la práctica sistemátic­a de la minoría parlamenta­ria de recurrir a la sede constituci­onal cuando su opinión no prevalece en el Congreso Nacional, pero también por el ejercicio de sus atribucion­es de oficio”.

En su crítica al eventual rol de “colegislad­or” del TC, los senadores mencionan en su proyecto los casos de la Reforma Laboral, la interrupci­ón voluntaria del embarazo en tres causales y la creación de un Sernac 2.0.

Si bien todas las institucio­nes del Estado son revisables y mejorables en su función, la reforma propuesta por los senadores PS no da cuenta -hasta donde se conoce- de una expectativ­a de mejora administra­tiva sustancial del sistema, de sus implicanci­as ni alcance. Por el contario, según los argumentos esgrimidos, la agenda planteada tiene más un carácter reactivo al resultado del trámite de algunos proyectos que no dejaron conformes a los legislador­es.

No es oportuno revisar el funcionami­ento de ninguna institució­n si lo que se busca es acomodarla­s de acuerdo con las expectativ­as personales (o de partido) que se puedan tener.

La modernizac­ión y mejor funcionami­ento del Estado debe responder a intereses superiores y no a agendas particular­es. ℗

Newspapers in Spanish

Newspapers from Chile