Fallida licitación del Transantiago
El Transantiago le ha costado al Fisco cerca de US$16 mil millones en sus once años de operación, lo cual lo transforma en una política pública cuestionable respecto de su eficiencia y sustentabilidad.
AONCE años de su puesta en marcha, el Transantiago sigue presentando problemas en su operación y mejoras futuras. Reflejo de esto es la disposición del Tribunal de Defensa para la Libre Competencia (TDLC) que mantiene paralizada la actual licitación, prácticamente desechando la posibilidad que sea este Gobierno el que adjudique las seis zonas de la capital en competencia.
El TDLC argumenta que la medida cautelar se mantiene debido a los reparos respecto del plazo efectivo para formular las ofertas, como las cláusulas relativas a los terrenos para los terminales, circunstancias que parecieran favorecer a los actuales operadores. En entrevista con Tele 13 Radio, la ministra de Transportes, Paola Tapia, aseguró que con ese fallo se limitan las posibilidades de generar mayor competencia dentro del sistema. “Aquí se produce la paradoja de que la decisión del TDLC lo que hace es generar menos competencia porque habrá que hacer negociaciones directas”. La hasta ahora fallida licitación del Transantiago de nuevo pone en entredicho la funcionalidad y sustentabilidad del sistema de transporte capitalino.
El Transantiago le ha costado a Fisco cerca de US$16 mil millones en sus once años de operación, lo que lo transforma en una política pública cuestionable respecto de su eficiencia e impacto.