Gasto del Gobierno en I+D se estanca desde 2011. Representa el 0,36% del PIB

Un estudio de la Dirección de Presupuestos analiza los montos destinados para programas de Ciencia, Tecnología e Innovación en los últimos 10 años detallando los ministerios y regiones que se han visto más beneficiados.

—Hace años que se escucha en nuestro país la necesidad de fomentar el desarrollo de investigación y desarrollo (I+D) para elevar la productividad. Sin embargo pareciera que estos discursos no se han plasmado en la realidad ya que un estudio de la Dirección de Presupuestos (Dipres) indica que los recursos públicos que destina Chile para programas de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI) se han mantenido estancados en torno al 1,6% del presupuesto del Gobierno.

El informe titulado “Ciencia, Tecnología e Innovación en Chile: un análisis presupuestario”, señala que en 2017 el presupuesto del gobierno en CTI representó un 0,36% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que reflejó una disminución respecto del 0,38% del Producto del año anterior. Aún así está muy alejado del promedio de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) que alcanza a 2,4% del PIB.

VOLÚMENES El presupuesto en CTI ha registrado un aumento sostenido en los últimos años llegando a un peak en 2017 $644.730 millones, “entre los años 2008 y 2017 este presupuesto ha aumentado todos los años, totalizando una variación de un 97% real” desde que partió en 2008 con $327.075 millones.

De acuerdo al informe los mayores saltos en este gasto se observaron entre los años 2009 (31%) y 2010 (21%), debido a la creación de Becas Chile, y la expansión del Fondo de Innovación que va a regiones (FIC)

Pero estos montos no han beneficiado a todos los servicios públicos, como lo detalla un estudio de Rodrigo Balbontín, Juan Andrés Roeschmann y Andrés Zahler (citado en el informe) que advierte: “el aumento en el presupuesto para CTI no ha sido homogéneo entre los principales ministerios y, como consecuencia, en las mayores instituciones ejecutoras de estos programas”.

De hecho, ha sido el ministerio de Educación el principal beneficiado con estos recursos, ya que sólo en 2017 se llevó el 50% del total del presupuesto, con $319.719 millones. En segundo orden figura la cartera de Economía que concentró el 30% del gasto en CTI con $196.217 millones, aunque “lejos del tamaño de los recursos que maneja Conicyt”.

Respecto de los énfasis puntuales en los períodos de gobierno, el reporte de la Dipres acota que “los recursos son consistentes a énfasis en emprendimiento y ciencia en el Gobierno de Sebastián Piñera; y en desarrollos de planes y políticas de innovación en el segundo gobierno de Bachelet”.

Finalmente, el informe cuestiona que estas asignaciones “aún no obedecen a estrategias sistémicas que justifiquen la actual relevancia relativa en áreas, instituciones o focos estratégicos”.