“La geotermia nos permite soñar, con los ojos abiertos, en un Chile 100% renovable”
—La política de desarrollo de Enel es clara: “Si una comunidad está en contra de un proyecto, nosotros no lo hacemos”, recalca Cammisecra al teléfono desde Roma. Es que la empresa verde también ha sufrido el rechazo de la comunidad en algunos proyectos de generación, como el que sufrieron en la construcción del parque eólico Renaico, en la Región de La Araucanía. Pese a eso, el ejecutivo indica que la conflictividad a la fecha ha ido disminuyendo y que confía en la capacidad de diálogo que han establecido con las comunidades, luego de experiencias complejas, como las vividas por el desarrollo de los fallidos Neltume e HidroAysén.
Las energías verdes también han enfrentado problemas con comunidades, ustedes lo están viviendo con el proyecto, ¿se esperaban esa reacción, considerando la historia de la compañía con proyectos emblemáticos como HidroAysén?
—Si una comunidad está en contra de un proyecto, nosotros no lo haremos. Nosotros no actuaremos de forma coercitiva, no lo hemos hecho nunca en ningún lugar del mundo. Sin embargo, confío en la capacidad que tenemos de demostrar qué tan beneficioso puede ser el desarrollo de un proyecto renovable en una comunidad, en términos de creación de trabajo y de ayuda al crecimiento económico de la comunidad. Ahora, sinceramente, no tenemos muchos conflictos, tuvimos algunos en el pasado, pero siempre hemos logrado un entendimiento y una repartición de la creación de valor. Pero cuando las comunidades no han querido hacer la inversión, no se hace. En Chile hemos devuelto varios derechos de agua exactamente por esta razón, fue el caso de Neltume y del proyecto HidroAysén. Eran proyectos donde no se generaba una armonía. Esta es nuestra filosofía para crear inversiones en cualquier parte del mundo.
Su último viaje a Chile fue por la inauguración de Cerro Pabellón, ¿cuál es el plan de crecimiento que están viendo para la planta geotérmica?
—Le tengo cariño a ese proyecto. Ver la planta en operación a 4.500 metros de altura ha sido un honor. Hemos ganado la licitación el año pasado por la segunda etapa de Cerro Pabellón, junto con un proyecto eólico y solar, ahora estamos en la etapa de desarrollo y en pocos meses más se construirá la segunda etapa de Cerro Pabellón. La geotermia es una tecnología muy especial, que necesita grandes liderazgos tecnológicos y espaldas financieras y tiene sus beneficios, porque es energía base y se complementa fantásticamente con la energía eólica y solar. Pensamos que el potencial geotérmico de Chile, que es muy bueno, se desarrollará en este sentido, es decir, combinando las tecnologías para que cada una pueda aportar con su ventaja. La PULSO DOMINGO desventaja es que es menos barata que la energía solar, pero es energía base y eso nos permite soñar, con los ojos abiertos, en un Chile 100% renovable en el futuro.
Después de Chile, ¿qué país será relevante dentro del plan de inversiones de EGP en la región?
—En Latinoamérica el otro gran país es Brasil. En Brasil nosotros tenemos una presencia importante, porque hemos ido ganando procesos regulados y no regulados. Tenemos una presencia histórica de más de 10 años, con dinámicas diferentes comparadas con Chile, pero con el mismo éxito. Para nosotros, Brasil es un país muy importante. Estamos intentando abrir Colombia, nosotros estamos construyendo la primera planta solar (El Paso, 86,2 MW) conectada al sistema de despacho centralizado de Colombia y seguimos empujando las renovables. Estamos en una etapa mucho más verde del desarrollo de las renovables, no se puede comparar ni con Brasil ni con Chile. Pero el hecho de haber realizado esta primera inversión, que hoy está en fase de construcción, es una señal muy fuerte que estamos dando al país y pone de manifiesto nuestro compromiso con Colombia, donde esperamos que las renovables logren el espacio que están teniendo en otros países de América Latina.
¿Qué planes tienen para Argentina y Perú?
—En Perú tuvimos un éxito muy fuerte en la subasta pasada y ya entregamos la primera planta solar que está operando (Rubi, 180 MW). Además, ya entregamos la planta eólica (Wayra) que también está operando desde hace varias semanas, y demostramos el aspecto positivo que las renovables pueden tener en un país donde su matriz energética está enfocada en el gas. Por eso, esperamos que el gobierno promueva la nueva subasta regulada y que los grandes clientes se abran a contrataciones bilaterales. En cuanto a Argentina, va muy bien. Ellos han realizado tres subastas reguladas y nosotros nos quedamos con una licitación de energía eólica (de 100 MW) y que hoy es un proyecto que está en etapa de construcción. En el país estamos apostando mucho a la contratación bilateral, es decir, a la capacidad que tenemos de actuar directamente con grandes clientes para desarrollar proyectos que después entreguen energía para el suministro seguro de nuestros clientes. Otro país importante para nosotros es México, donde tenemos un rol de liderazgo absoluto, somos el primer operador después de la comisión federal. Así que estamos invirtiendo mucho en Colombia, Perú, Brasil, Argentina y en Chile. Tenemos un enfoque especial en Latinoamérica, donde como grupo Enel estamos actuando también gestionando las empresas térmicas, realizando las inversiones en distribución y también realizando nuevas inversiones en energías renovables.P