Moody’s ve riesgos en Chile por nueva Constitución y próxima elección presidencial
Aunque destacan la sólida posición fiscal del país y la reforma tributaria, reconocen probables deterioros en las cuentas públicas.
—Las consecuencias negativas de las protestas sociales en Chile se prolongarán por lo menos hasta 2021, de acuerdo con la agencia de clasificación Moody’s. En un informe difundido ayer, consideran que el panorama nacional luce complejo, mientras se van introduciendo nuevos factores de incertidumbre.
“La redacción de una nueva Constitución y las próximas elecciones presidenciales plantean riesgos a mediano plazo”, se lee en el documento, donde agregan que “la gestión de las crecientes demandas sociales para un crecimiento más inclusivo, al mismo tiempo que se abordan las perspectivas de crecimiento a mediano plazo más bajas (lo que limitará los ingresos del gobierno), seguirá siendo el desafío crediticio clave del soberano”.
Además, aseguran que están poniendo atención a la posibilidad de que se lleven a cabo cambios fundamentales en la nueva Carta Magna. Y si bien precisan que ese no es su escenario base, por la votación de dos tercios que se consideró para la elaboración de la nueva carta fundamental, plantean que la incertidumbre al respecto afectará la confianza de los inversionistas.
En tanto, la futura carrera presidencial es vista como crucial, dado que “proporcionará una indicación de la dirección en la que el consenso sociopolítico está avanzando, particularmente en lo que respecta a cuáles serían las prioridades políticas en los próximos años”.
A la hora de analizar la sielaborado tuación actual, la agencia asegura que “la marcada desaceleración del crecimiento económico y el paquete de estímulo fiscal del gobierno impulsarán un deterioro” de las cuentas públicas. Sin embargo, destacan que eso “estará mitigado por la aprobación de la reforma tributaria”.
Considerando lo anterior, sostienen que “la sólida posición fiscal del gobierno seguirá apoyando su perfil crediticio”, marco en el cual subrayan que “el principal desafío crediticio del soberano seguirá siendo atender las crecientes demandas sociales de un crecimiento más
inclusivo al mismo tiempo que afronta perspectivas de crecimiento más bajas en el mediano plazo”.
Más allá de las cuestiones domésticas, este año a nuestro país también se le complicó el escenario externo. Moody’s rebajó de 5,8% a 5,2% su previsión de crecimiento de China en 2020, por el impacto del coronavirus y afirma que la menor demanda de ese país “pesa directamente sobre el sector minero de Chile y el crecimiento del PIB, con el cobre representando el 50% de las exportaciones totales del país en 2018, principalmente exportado a China”.P
Moody’s rebajó la calificación chilena en 2018 a “A1”, dejando su perspectiva en “estable” desde entonces.